Wertetilneck: «Impacto de las medidas nacionales»

(ADN). – Alberto Weretilneck, maneja un barco al que tiene de darle un rumbo cierto y las coordenadas satelitales nacionales son contradictorias. Vale la figura cuando el mandatario rionegrino pide previsibilidad al Presidente de la Nación, un tema planteado el viernes pasado al ministro del Interior Guillermo Francos y Nicolás Posse,  Jefe de Gabinete, en la reunión de gobernadores con los funcionarios nacionales.

El tema central es el retiro de recursos que llegaban desde Nación, que Weretilneck ubicó en un 20% la caída interanual en febrero. Por ejemplo, el aporte de 1000 millones de pesos mensuales en Educación que no se reciben más y que afecta a los docentes.

En una nota de ayer en Radio Raíces de Viedma, el mandatario rionegrino reiteró que “nosotros pedimos tener previsibilidad”.

“Validamos al gobierno” dijo y “aceptamos las reglas de la democracia”, pero destacó que el ataque del gobierno no es sólo en lo discursivo “sino también de lo económico”.

Y de esta manera, Weretilneck le puso un marco real a la negociación con Nación. Precisó que “no se puede minimizar el impacto de las medidas nacionales”, en el entendimiento que para Milei el déficit cero “no se negocia”, y que al Presidente “hay que tomarlo en serio”, porque lo que dice “lo intenta hacer”.

El mensaje del gobernador es claro: más austeridad, trabajar bien los sistemas de gastos y de costos, y si bien reconoció que en las actitudes del gobierno nacional “hay muchas contradicciones”, hay que ser precavido y muy cuidadoso, para “evitar la cesación de pago y cumplir con los sueldos”.

Cómo resolvió esta ecuación el gobierno provincial. Fue cuidando los gastos, no se renovaron contratos, la obra pública está virtualmente parada, al igual que en el gobierno nacional, pero se destacó la importante licuación salarial, que devino en recursos.

Excepto el Poder Judicial, que no fue tocado, los empleados públicos en general y el Poder Legislativo, que recibieron bonos, aportaron a este ahorro, sin dudas un tema previamente conversado con los principales gremios.

Si se tiene en cuenta que con una inflación superior al 45% en diciembre y enero y estimada en más del 15% en febrero, el gobierno pagó definió pagar en bonos, no remunerativos, que representó un incremento salarial promedio del 10% mensual.

De esta manera licuó salarios y la masa mensual, (en aproximadamente un 40%) que entre otras cosas le permitió juntar algún dinero para aportar al pago de la cuota de 47 millones de dólares del Plan Castello.