¿La fórmula?. ADN

Los cierres de lista suelen darse a pocos días de la oficialización de candidaturas en la Justicia y suelen ser descarnados. Nada es seguro hasta que el documento -que puede sufrir modificaciones en el camino- llega al Tribunal Electoral. Pero un dato es recurrente en el (ampliado) Frente para la Victoria: las altas chances que Magdalena Odarda integre el binomio junto a Martín Soria.

Desde aquella foto en la Fiesta de la Manzana se fueron sucediendo las señales: fotos, encuentros, recorridas… pero la última semana tuvo dos datos que certifican esa hipótesis. Uno fue el legislador Marcelo Mango (FG-FPV) aprovechó la presencia de Tania Lastra (JSRN) en la conducción de un tramo de sesión del Parlamento el jueves, para indicar que una mujer puede ocupar ese rol. Después del piropo a la roquense, aseguró: «trabajaremos para que el año que viene una mujer sea vicegobernadora». El otro y más específico, la encuesta que llegó a Roca en estos días, donde muestra la sumatoria de votos que aporta la líder de RIO.

El estudio de opinión pública certifica dos escenarios: uno, de triunfo (en algunos casos por el doble) del intendente de Roca sobre tres candidatos de Juntos: Alberto Weretilneck, Pedro Pesatti, y Fabián Zgaib. Los porcentajes varían de acuerdo al candidato. El gobernador sigue siendo el de mayor adhesión en el oficialismo. Dos, en el encuestado de fórmulas, Soria-Odarda levanta en 5 o 6 puntos la victoria del frente opositor, que rondaría el 45%.

Por ahora, números, falta mucho y no está todo dicho.

Sin embargo, en el círculo íntimo sorista alegan a favor de la candidatura de Odarda (recuerdan que el «gringo» abrió la fórmula en 2011), a pesar de algunas críticas a esa posibilidad. Uno de los que se manifestó en contra fue el legislador Ariel Rivero quien en una radio en Viedma aseguró que «no acompañaría una fórmula Soria-Odarda». “Nosotros con Magdalena Odarda no tenemos absolutamente nada que ver. Fue una férrea opositora, con todo el respeto que le tengo a la legisladora pero me parece que no tiene nada que ver con el peronismo», explicó. Además, metió una cuña en el programa de gobierno del FPV: «Tiene una negatividad respecto al desarrollo que el peronismo no la tiene”. La referencia es por la militancia ambientalista de la Senadora.

«Para nosotros no es un problema» dijo un hombre cercano al intendente roquense. «Cuando nos opusimos a la planta nuclear lo hicimos convencidos, nuestros dirigentes hacen amparos por la salud del río, los basurales municipales a cielo abierto…, estamos en la misma agenda», subrayó.

Esta semana se intensificó el debate interno entre los dirigentes que representan al Peronismo Federal y a Unidad Ciudadana. Pichetistas y kirchneristas bajaron a Río Negro la disputa nacional.

Los cruces mediáticos se festejaron en el oficialismo, cada vez más convencido que habrá ruptura en el PJ rionegrino y ello favorece sus chances electorales. ¿Por qué? Porque atomizan el escenario. En Juntos imaginan al manos cuatro fórmulas competitivas más el espacio histórico de izquierda que suele concentrar el 10% del padrón. En la Casa de Gobierno ven al FPV por un lado, al Peronismo Federal por el otro, y a Cambiemos disputando la elección 2019.

A esa estrategia le faltan definiciones como el balotaje y la re-relección, siempre discutidas y promocionadas pero ciertamente hasta ahora, no hay nada. También queda saber si las PASO, que están vigentes, serán anuladas nuevamente o se utilizarán como segunda vuelta (y esquema de alianzas) de hecho, en caso de un entendimiento del oficialismo con diversos sectores de la oposición para generar -informalmente- el promocionado «frente anti-Soria».

Pero también resta saber, y quizás sea lo medular, la fecha de elecciones.

En el mientras tanto, Cambiemos va perdiendo protagonismo al ritmo de la caída de imagen del presidente Mauricio Macri, las diferencias que se marcan desde Río Negro a las políticas nacionales, y sus propias internas. Y en el campo de la centroizquierda, se suma el armado de Unión Popular (que a nivel nacional comanda el histórico líder de la CTA, Vícitor De Genaro) que tendrá como estandarte al jefe de ATE, Rodolfo Aguiar, compitiendo por un escaño en el parlamento rionegrino.

Mientras la política juega su juego, esta semana se debatió con dureza la creación de la empresa Río Negro Compras, un proyecto que ingresó con sigilo a la Legislatura, pero la ventilación -dos días antes de la sesión- generó un vendaval.

En el gobierno aseguran que esperaban la aprobación para salir a explicar la idea de la tarjeta de crédito para los estatales, y están convencidos que será una herramienta que mejorará el crédito a los trabajadores públicos y que potenciará el consumo. Por eso, indican, hay interés entre las pymes. Pero la oposición cree que es un negociado y, por el contrario, endeudará aún más a los empleados. Denunciaron que es para «complicar a la UPCN y a todas las mutuales» y pusieron el foco en los códigos de descuento.

Un especialista en comunicación política observó: «ya van varios temas que el gobierno no puede capitalizar». La referencia es -entendiendo que la tarjeta es beneficiosa- a que «se perdió una chance». «No hay muchas políticas en favor de los trabajadores», agregó. «Tampoco políticamente pudieron explotar que el gobierno absorberá trabajadores de Agricultura Familiar (despedidos por Macri), le dejaron el anuncio a ATE». Y agregó: «hubieron iniciativas del oficialismo en el Parlamento en la ampliación de derechos, tampoco pudo ser capitalizado».

En la oposición aseguran que para promocionar esas políticas «tenían que diferenciarse de su socio» nacional.

También en el Parlamento, y sorprendiendo a propios y extraños, el legislador Javier Iud anunció que no renunciará ni se tomará licencia. Lo hizo después que no prosperara la formulación de cargos en su contra por corrupción de menores. En su bloque (FPV) había incomodidad. Aún no saben cómo reaccionar. Si bien es cierto que el sanantoniense ganó una batalla, la guerra es larga. En el Ministerio Público aseguran que habrá otra instancia de acusación y aseguran que -por las nuevas pruebas- y la renovada estrategia, esta vez sí la causa llegará a juicio.