El legislador Ramos Mejía señaló que «no vemos gestos de austeridad del gobierno»

El legislador Ramos Mejía (FpV) pidió al Ejecutivo provincial que informe de los gastos que en concepto de viáticos que se pagaron en el primer semestre del año 2015 y en el primero de este año, además de otros gastos como en
ceremonial y protocolo, y especialmente, solicitó un detalle comparativo de planta de funcionarios y empleados entre los dos semestres (1ro. 2015 y 1ro. 2016).

“La provincia está en una situación financiera crítica y no vemos gestos de austeridad del Gobierno de Weretilnek acordes con esto, por eso queremos saber cuánto se gasta en viáticos en tiempos que se le ha pedido a la Legislatura autorización para ampliar la emisión de letras, ampliar el giro en descubierto bancario y ampliar la emisión de cheques de pago diferido para financiar gastos corrientes.» señaló Ramos Mejía.

Agregó que estas herramientas financieras costarán a nuestra Provincia unos $ 2 millones diarios aproximadamente, entre los intereses del descubierto bancario, el costo financiero de los cheques que se emiten y el correspondientes a las letras “es el costo de 5 colegios técnicos por mes como el proyectado CET 28 de Bariloche, o dos viviendas por día”, destacó.

Señaló el legislador barilochense que sólo en concepto de descubierto, el gobierno rionegrino debió abonar más $ 40 millones en los primeros seis meses del año, cifra que sin duda “pone en riesgo el cumplimiento de sus obligaciones esenciales, como la prestación de servicios que son vitales para los rionegrinos, y esto termina afectando a aquellos que más necesitan del Estado.”.

Ramos Mejía dijo que “el principal responsable de esta situación es el gobierno de Weretilneck, quien no sólo despilfarró los $ 1.400 millones percibidos por la Provincia por la renegociación de contratos petroleros, sin que se haya construido una sola obra de trascendencia en Río Negro, sino que además ahora, por ausencia de un plan de gobierno serio, falta de previsión política e impericia, nos lleva a una situación financiera en la que Río Negro apenas puede pagar los sueldos pidiendo prestado para esto, al Banco Patagonia”.