Críticas y mesura en la oposición frente al endeudamiento provincial

La provincia nuevamente emitirá letras de acuerdo a la autorización lograda por la Legislatura, que junto a otras medidas como el pago diferido de cheques y el descubierto bancario, son las herramientas adoptadas por el Ejecutivo para lograr dinero cantante y sonante que permita pagar sueldos, aguinaldos y demás gastos, en virtud del atraso y la falta de recursos propios tanto recaudatorios como de la coparticipación nacional menguada como consecuencias de la actual polìtica económica que restó recursos a Río Negro y a todas las provincias.

La situación de las arcas del Estado rionegrino es tema de análisis y alerta de distinto sectores. En el bloque de legisladores del FpV la cuestión no pasa inadvertida y si bien hay coincidencias en cuestionar las polìticas oficiales del gobernador Weretilneck, no son similares las expresiones públicas.

El bloque votó las medidas solicitadas por el Ejecutivo para el endeudamiento, si bien con críticas y observaciones, pero la mayoría de los legisladores tienen una visión local de la situación que en algunos casos requiere del acompañamiento de los intendentes municipales.

«Hay mala administración», sostienen en los despachos de la bancada opositoria de la calle Gallardo y del mismo modo alertan: «se prendió la luz amarilla y hay pronósticos de agravamiento». ¿Cómo se expresa hacia afuera, hay palomas y halcones?

En estos roles está claro que el bloque del FpV tiene una suerte de minibloque que parecería conducido por Nicolás Rochas, legislador de Viedma y con lìnea directa con Martín Soria, y que en sus declaraciones públicas -la mayoría denuncias contra el gobierno- tiene como socios a los diputados Alejandro Ramos Mejía, de Bariloche y Luis Albrieu, de Villa Regina.

No se necesita mucha suspicacia para advertir que hay una lìnea de denuncia, metodología prefertida por el presidente del PJ, cuando de hacer política se trata, mientras que en el resto, si bien los cuestionamientos existen, hay cautela, una actitud que en no pocos casos pidieron los intendentes que no ven provecho en pelearse con el Poder Ejecutivo, al que necesitan casi a diario, más aún hoy cuando no existe más el paragüa del gobierno nacional y esta menguado el poder de gestión del senador Miguel Pichetto.

El desfinanciamiento del Estado provincial, el endeudamiento y las limitaciones de gestión seguirán marcando las relaciones del partido gobernante con todo el abanico político rionegrino.

Hasta aquí entretelones del principal bloque de la oposición, pero por el lado de la UCR y el Frente Progresista tampoco hay líneas claras frente a esta situación. Nadie vislumbra hasta el momento como se sale de esta dificil situación, incluso el PRO que trata de disimular responsabilidad nacional en los endeudamientos provinciales.