Basta de silencio cómplice ● Multisectorial contra la represión e impunidad de Bariloche

Vergüenza ajena provocan las declaraciones del gobernador Weretilneck, quién ha manifestado públicamente su apoyo a la marcha del 18 de Febrero, expresando con total descaro que los pedidos de justicia deben ser acompañados por los gobernantes. Es lamentable tener que recordar al gobernador que desde su gobierno nunca fueron acompañados los reclamos de familiares de la larga lista de pibes asesinados en nuestra provincia a manos de la policía.

Un ejemplo de ello es que a 4 años y 7 meses, los crímenes de los jóvenes Nicolás Carrasco y Sergio Cárdenas continúan impunes, a pesar de contar con testigos directos de la masacre. Contradiciendo un discurso inicial en el que se prometió investigar hasta las últimas consecuencias, el gobierno ha colaborado desde su inacción a paralizar y entorpecer la presentación de pruebas y testimonios que permitirían llegar a la verdad,protegiendo de este modo judicial y política a los autores materiales e intelectuales de estos asesinatos.

En el año 2013, el gobernador presentó públicamente un mapa delictivo, en el que los barrios señalados son principalmente son los más humildes y postergados de Bariloche, estigmatizando así a familias enteras.

Sin embargo, nada dijo el Sr. gobernador de los ladrones de guante blanco que mientras exigen mano dura para cuidar sus intereses, son quienes manejan el narcotráfico y dejan esta ciudad sumida en la más cruel de las pobrezas y desamparo.

Por lo dicho, las declaraciones del gobernador, son un claro ejemplo de oportunismo político sin el menor sentido de la ética demostrando así que cualquier ocasión pareciera válida en tiempos de futura campaña. Los amigos de ayer parecieran ser los enemigos de hoy pero quién sabe mañana.

Se llama a la ciudadanía el día 18 de febrero a participar de una marcha de silencio. Mencionando sólo un caso de los demasiados que existen en nuestra provincia, como la causa del 10 de junio de 2010. el silencio y el entorpecimiento han sido las características más notorias del poder judicial. A través del juez Ricardo Calcagno, no se investigó, pero sí se encubrió a la policía y a los funcionarios políticos que dieron la orden de reprimir, entorpeciendo para ello la causa, desestimando la declaración de testigos que reconocieron a quienes dispararon a Nino Carrasco, desconociendo las pruebas balísticas contundentes, no contemplando las escuchas, ignorando los partes policiales y las pruebas que aportarían datos fundamentales para el esclarecimiento de la causa.

Estamos cansados de silencio y de causas cajoneadas que luego prescriben sin ser resueltas, como el caso del joven Pilquiman.
Río Negro ha sido denunciada por siete organismos de derechos humanos como la segunda provincia con más casos de criminalizacion de la protesta social y violación de los derechos humanos.

El poder judicial no puede pretender ahora desentenderse de este estado de situación.No es casual que ninguna de las causas importantes de impunidad hayan sido resueltas por este aparato judicial.

Como desde el primer día, La Multisectorial contra la Represión y la impunidad de Bariloche acompaña a las familias en la querella y toda acción de reclamo por verdad y justicia. Insistimos en la importancia de estar organizados entendiendo que sólo la unidad de los de abajo combate el atropello de los de arriba. No sólo luchamos por Diego, Sergio y Nino sino para que nunca más haya un 17 de Junio. La memoria, la lucha y la movilización popular son nuestras herramientas para evitar que estos casos de terrorismo de estado se resuelvan como quiere el sistema: causas trabadas y/o cajoneadas; policías asesinos libres y sus cómplices encubridores impunes a pesar de que existen pruebas sobre quiénes fueron los asesinos que mataron a nuestros pibes. Y esto es posible porque el poder judicial de nuestra ciudad, los protege.

Cuando todavía estamos esperando manifestaciones políticas públicas que insten a la investigación por parte del poder judicial sobre los hechos del 17 de junio de 2010, las violaciones a los derechos humanos se reanudaron contra los vecinos de los barrios populares, afectando la vida cotidiana, la seguridad de los vecinos y victimizando nuevamente a los mismos protagonistas.
Basta de silencio cómplice. Exigimos de una vez por todas, verdad y justicia para el pueblo.

Multisectorial contra la Represión y La Impunidad de Bariloche