Las profesiones vinculadas a la visión • Cámara de Ópticos Zona Atlántica

La población debe conocer que el acto de recetar anteojos, es realizado por oftalmólogos, que han obtenido primero el título de médicos, y luego se han especializado durante años con intensa práctica hospitalaria.

El 90% de las consultas oftalmológicas son por trastornos de la visión. El no ver de cerca, por ejemplo, hace pensar que el paciente puede desarrollar una enfermedad muy conocida, llamada presbicia. No obstante, tras esa sintomatología, pueden esconderse afecciones mas graves como por ejemplo un inicio de glaucoma, un trastorno de lubricación, diabetes, etcétera.
En los últimos años se intentan prácticas que son afines con esa profesión, realizadas por personal técnico con escasa formación y muy parcializada, llegando en algunos casos a recetar anteojos sin haber estudiado Medicina
Desde las distintas Entidades Médicas Nacionales se ha intentado concientizar a la población sobre estas prácticas no reconocidas por nuestra legislación, haciendo entender que la salud visual es mucho más compleja e importante que la simple receta de una lente.
Se conocen en diferentes provincias argentinas la existencia de controversias judiciales con quienes pretenden ejercer la optometría en detrimento de la oftalmología y la óptica técnica.
Existen enormes diferencias entre el alcance de la optometría y la oftalmología. Esta última es una rama de la medicina destinada al diagnóstico y tratamiento de las enfermedades del ojo.
Los oftalmólogos -usualmente llamados oculistas- son médicos con una especialización de varios años que entre otras se dedican al tratamiento de las ametropías -léase miopías, presbicia, etc.-. No sólo recetan lentes, sino que prescriben otras correcciones ópticas necesarias y en caso de necesitad indican la posibilidad de una cirugía.
El examen oftalmológico, que todo el mundo necesita, se complementa con una serie de pruebas para detectar enfermedades que no siempre se manifiestan en forma evidente y precoz como ser: glaucoma, desprendimiento de retina, maculopatías, retinopatía diabética, etc., etc. Especial importancia reviste el glaucoma, ya que raramente se expresa hasta períodos terminales de la enfermedad.
El glaucoma afecta al 1% / 2% de la población general y es una de las principales causas de ceguera en el mundo. Gracias a esta política de atención por oftalmólogos, es que la Argentina tiene una menor incidencia de ceguera por glaucoma que el de los Estados Unidos, donde parte de la atención oftalmológica es llevada a cabo por optómetras. Los optómetras son técnicos -no médicos- que después de dos años de estudio están en condiciones de prescribir anteojos, sin tener más que someros conocimientos sobre las enfermedades oculares.
La optometría nació en los Estados Unidos, cuando aun no había médicos oftalmólogos en ese país. Por años fue esta una especialidad crítica y los pocos médicos oftalmólogos relegaron parte de su trabajo de refracción en manos de estos técnicos.
En la Argentina existen 4.500 médicos especialistas en oftalmología. La OMS indica que debería existir un (1) oftalmólogo cada 20.000 habitantes. Haciendo las cuentas sabrán que hay 2500 oftalmólogos más que lo que el país necesita, en Viedma hay 6 oftalmólogos y una población de 73.322 habitantes, lo que nos da 1 por cada 12.220. Con el agravante que en los próximos 6 años, 1500 nuevos especialistas engrosarán las filas de profesionales de esta rama. Como ven, existen oftalmólogos de más. Ante este panorama cabe preguntarse ¿Para que necesitemos más recetadores de anteojos? Se esconde solamente un negocio económicamente muy rentable? La prohibición legal alcanza tanto al acto de prescribir como el de comercialización por parte del optómetra. A nadie escapa que esto aumenta el interés por prescribir y por lo tanto vender más anteojos.
El óptico técnico es el único profesional habilitado para que luego de una consulta con el medico oftalmólogo, pueda asesorar, producir y anteponer medios que corrijan la afección que posee el paciente mediante sus conocimientos. El óptico es un profesional de la salud, como lo indica la ley, personal auxiliar de apoyo al ejercicio de la medicina
Una correcta salud visual es el bien tan preciado que pretendemos para nuestros semejantes. Una vez aclarada la actividad que legalmente puede ejercer cada profesional al menos la población podrá elegir sobre su salud visual
El ejercicio responsable de las profesiones empieza por respetarnos y hacernos respetar. Nuestra responsabilidad es del conjunto, pues en definitiva es la salud visual la que está en juego, y todos sabemos que todo aquello que se puede prevenir o consultar y diagnosticar a tiempo nos va a permitir tener una mejor calidad de vida.

C.O.Z.A
Camara de Opticos Zona Atlantica