Springfield. ADN

El Gobierno se entusiasmó con la idea de desarollar energía nuclear en Río Negro. El proyecto Patagonia de la Casa Rosada viene con una planta para la región. Por eso, Mauricio Macri volvió a subir a la comitiva presidencial a Alberto Weretilneck, esta vez, en su gira por Dubai, China y Japón para lograr financiamiento.

Nelson Iribarren planteó que el proyecto reactivaría la economía de la ciudad. El jefe comunal de Sierra Grande se hizo eco de la posibilidad de instalación de la planta nuclear allí, y salió a ofrecer espacio. Y aunque limitó el avance a una consulta popular, dejó en claro que está a favor del proyecto. Piensa en un empuje extra frente al estancamiento que sufre desde hace un año por la poca productividad de la minera.

Apoyando la idea, el ministro de Gobierno Luis Di Giácomo, reveló el entusiasmo que hay en la administración provincial. En estos momentos de estrechez financiera, un desarrollo de esa magnitud no es despreciable. Sin embargo, organizaciones ambientalistas y diversos espacios políticos y sindicales, se oponen por el riesgo de contaminación.

El gobernador gambeteó el tema y antes de partir, dijo que la idea es abrir el mercado del sudoeste asiático para exportar alimentos. Así, se escudó en el proyecto de su ministro de Agricultura, Alberto Diomedi, que insiste en que ésa la reconversión que debe hacer la provincia para salir del (casi) monocultivo frutícola.

Pero el viaje se tiñó de política. Algunos dirigentes de la oposición marcaron que sus denuncias eran correctas y que Weretilneck es Macri. Atento, el gobernador volvió a enmarcar la gira -como la de España- en términos institucionales y subrayó que al avión se subieron gobernadores peronistas.

Esto ocurre cuando Juntos Somos Río Negro había tomado la decisión de separarse políticamente del macrismo. Y la punta de lanza es el vicegobernador Pedro Pesatti que cuestionó las últimas medidas de la Casa Rosada. Lo acompañan en esa tarea la ministra de Educación Mónica Silva, la secretaria de Derechos Humanos, Laura Méndez, algunos legisladores y, más camuflado, el siempre crítico ministro de Economía, Isaías Kremer.

Pero la Provincia evalúa que debe apoyar la idea que se instale la quinta planta nuclear de la Argentina en Río Negro. Entiende que el desarrollo hoy está más controlado que en los 80´, fundamentalmente después del accidente de Chernobyl. Y asegura que existen innumerables aplicaciones en materia científica, teconológica y médica que justifican esa producción.

Desde la oposición indican que Río Negro tiene otros recursos. Y critican la pasividad de Weretilneck frente a Macri sobre las políticas de la Casa Rosada que afectaron a la provincia. Magdalena Odarda denunció que el tarifazo de luz asfixia (aún más) a la fruticultura. Y Javier Iud acompañará al Congreso al gobernador de Chubut, Mario Das Neves, en su reclamo por la devolución de los reembolsos a los puertos patagónicos.

El escenario de este debate son las elecciones municipales de hoy. Darwin, Godoy, Los Menucos, Maquinchao, Ñorquinco, Pilcaniyeu, Pomona y Sierra Colorada eligen concejales. Y en Jacobacci, además de ediles, convencionales constituyentes, votación que surge como la más importante. El gobierno puso toda la carne al asador y quiere demostrar su poderío para sacar chapa rumbo a octubre, pero una denuncia del intendente Carlos Toro puso todo en jaque.

Un vagón del Tren Patagónico llegó esta semana a la ciudad con mercadería. El destinatario era Toro pero el jefe comunal se despegó e hizo la denuncia. Desde Desarrollo Social -nerviosos- apretaron a los trabajadores creyendo que la «batida» venía de adentro. Lo cierto es que el diablo metió la cola y dejó en evidencia una práctica clientelar habitual. Intervino la Fiscalía de Investigaciones Administrativas y ya sustancia un sumario. Además, el fiscal Marcelo Ponzone denunció penalmente al ministro Fabián Galli por no responder sus requerimientos: los motivos por los cuáles colchones, comedia, chapas y otros elementos fueron enviados a la ciudad. Galli solo atinó a decir que son para «emergencias» pero no hay ninguna (aparente) actualmente.

Toro, con una aceitada relación con Weretilneck, llamó insistentemente y sin resultados al gobernador para obtener explicaciones antes de formular la denuncia. Ante el silencio, convocó a una conferencia de prensa. Ayer por la tarde, horas previas a la elección y después de una semana cargada de polémica y escándalo, en Jacobacci seguía el «reparto» desde la delegación provincial. Hasta allí llegó el intendente con un escribano y volvió a formular una presentación.