Economistas de EEUU alertan sobre la dolarización

(ADN).- Dos reconocidos expertos categorizaron el plan de Javier Milei como «una idea terrible» para la Argentina.

Después del contundente éxito obtenido por Javier Milei y su partido La Libertad Avanza en las elecciones primarias (PASO), toma fuerza una de las propuestas más controvertidas de su programa: la dolarización.

Con regularidad, Ecuador es utilizado de ejemplo por quienes plantean esta solución para la economía nacional, pero: ¿solucionó esa decisión, sus problemas de fondo?

En ese contexto, en el que los candidatos a la Presidencia debaten esa salida como la solución a todos los males de la economía nacional, varias voces, tanto locales como internacionales, han expuesto los riesgos de la misma.

Robin Brooks, jefe del Instituto de Finanzas Internacionales, señaló en Twitter que la dolarización de Argentina “se trata de una idea terrible”, para después, en otro posteo, señalar el error que cometió el Ecuador al hacerlo.

“Argentina: La dolarización es una idea terrible, la última vez que se intentó esto terminó en una gran devaluación que lo descarta para siempre”, escribió el también exfuncionario del Fondo Monetario Internacional y de Goldman Sachs.

En su otro tuit, Brooks advierte que, mientras que Argentina debate la dolarización y utiliza a Ecuador como “una historia de éxito”, “cuando no lo es. El resultado es un crecimiento débil y una moneda sobrevaluada, que es la trampa de la que Argentina intenta escapar”.

En esa misma línea se expresó Mark Sobel, exfuncionario del Tesoro, quien señaló que la dolarización “puede sonar atractiva”, pero “no es la respuesta a los problemas del país”.

Para el también exfuncionario del FMI, “Argentina debe centrarse en el arduo trabajo de estabilización y liberalización, puesto que: “Al igual que el «plan de convertibilidad», la dolarización inflexible «sin salida» podría crear una convulsión mucho peor”.

“Con la dolarización, el crecimiento de Argentina dependerá de un superávit por cuenta corriente y de la entrada de capitales. Esto puede ser factible con un fuerte crecimiento mundial, altos precios de las materias primas, inversiones atractivas, un sólido estado de derecho y una moneda infravalorada”, agregó.