Producción: el «dólar soja» reaviva el reclamo del interior

(ADN).- “Me parece muy bien, es una medida muy acertada”. De esta manera, el ministro de Producción y Agroindustria de Río Negro, Carlos Banacloy, ponderó la decisión del Gobierno Nacional de instrumentar el «dólar soja», y aprovechó para reimpulsar el pedido del interior para que las economías regionales cuenten también con un tipo de cambio diferenciado.

El Ministro ya se había manifestado esta semana en ese sentido poniendo en foco la actividad frutícola (especialmente de peras y manzanas), pero aclaró que el pedido abarcaba todas las producciones del país.

“Entiendo que el Gobierno lo que necesita son divisas, y que en ese contexto las economías regionales no mueven la aguja. Pero sí creo que indudablemente se deberá incluir a este tipo de actividades. Sin lugar a dudas no pueden quedar afuera, y mucho más con el valor agregado que generan”, expresó Banacloy a la salida de un encuentro de la Mesa Ovina Nacional en la Sociedad Rural Argentina (SRA) al ser consultado por A24.com Agro.

¿Las economías regionales podrían endurecer su postura en este sentido, ahora que se conocen las medidas?, le consultaron.

«Yo creo que sí, es muy necesario. Yo creo que además los granos tienen un diferencial muy importante que hay que reconocerlos que es que además pagan retenciones. Ese tipo de cambio que tienen ni siquiera es el oficial y están muy por detrás de ese valor. Pero lo que hay que entender es que toda la economía nacional y todo lo que es la producción de granos no tiene ese componente inflacionario constante que sí tiene a lo mejor una economía regional por toda su composición de mano de obra. La regional tiene una mano de obra prácticamente constante», respondió.

Uno de los ejemplos a los que apuntó el funcionario de Arabela Carreras tiene que ver con el sector frutícola y las negociaciones paritarias, ya que se trata de una actividad que tiene cuatro negociaciones al año.

“Me parece importante destacar que ahora cuando viene un turista extranjero tiene la posibilidad de liquidar su divisa a un tipo de cambio diferencial y que eso es muy injusto, pensando en que un productor local, que viene haciendo todo el esfuerzo, que genera trabajo y riqueza no pueda tener ni siquiera ese mismo tipo de cambio que tiene a lo mejor un brasileño o un uruguayo que viene a disfrutar de sus vacaciones”, comparó.

Incluso se mostró optimista: “Me parece que esa mirada los ministros (de la Casa Rosada) la tienen muy clara y me parece que la van a defender. Entendemos que habrá una postura favorable con respecto a esta situación”.

Peras y manzanas

“Creo que el ministro Domínguez y Scioli, y hasta Batakis, entienden claramente que una economía regional tiene paritarias nacionales y que tiene paritarias domésticas y que va acompañando el proceso inflacionario con sus insumos. Hay que entender que una caja de fruta no sale sin valor agregado, es una caja que se cosecha primero y va al frio, y hoy el frio paga entre $5 y $7 por kilo de fruta por mes. Eso se traslada directamente al costo de fruta al comercializarla de septiembre a octubre y se acumulan los 5 meses de frio que ya han tenido en cada kilo de fruta”, detalló.

Para Banacloy el “poder de compra” que le queda al productor frutícola es cada vez menos. Y entiende que la misma suerte corren por estos días la actividad vitivinícola fundamentalmente en Cuyo, pero también los limones en Tucumán y la yerba mate en Corrientes y Misiones.

«Se pierde en esa relación de kilo/producto vs. un neumático, un kilo de fertilizante o lo que se fuera a comprar. Y en esa relación hoy las economías regionales vienen perdiendo, eso es una realidad. Y de esa manera hay que ver cómo se acerca el tipo de cambio oficial y el blue, que también me parece que es un tipo de cambio mentiroso que lo único que manifiesta es la incertidumbre”, indicó.

“Creo que hay que buscar un punto intermedio que le de algún tipo de rentabilidad extra al productor en lo que queda del año, porque todavía tiene por recibir liquidaciones de exportaciones que están con el tipo de cambio oficial y con un precio que está fijado al inicio de la temporada. Hoy no se puede modificar su precio. Entonces un productor que cerró a u$s 0,25 su kilo de pera, va a recibir eso ahora y los va a recibir con el tipo de cambio oficial. Y va a perder muchísimo en comparación del costo real de las cosas en relación a la inflación que vamos teniendo mes a mes”, apuntó.