Femicidios: dos adolescentes fueron asesinadas

El cuerpo de una joven de 18 años fue encontrado descuartizado en el río Limay, cerca de la localidad neuquina de Plottier. Laura Cielo López estaba desaparecida desde el jueves pasado. No fue el único femicidio del fin de semana. En una quinta ubicada en Chascomús, encontraron enterrado el cuerpo de Navila Serena Garay, la adolescente de 15 años que llevaba desaparecida cinco días. Por el crimen está detenido el tío de la joven.

Los dos casos se suman a los 155 que se registraron en el país desde inicio del año.

El cadáver de Laura Cielo López fue encontrado este domingo por la tarde en la zona de Los Espigones, a la altura del paraje de China Muerta. Las principales sospechas apuntan a que la joven fue asesinada y descuartizada, mientras que por el caso no hay todavía ningún detenido.

La chica había salido de su casa, en Plottier, el jueves último por la noche y como no regresó, sus familiares denunciaron su desaparición en la primera hora del sábado en la comisaría séptima de esa localidad.

Sus allegados habían iniciado una campaña de búsqueda por las redes sociales, al igual que en la página de la escuela CEPEM 8, donde la joven, oriunda de Mendoza, cursaba el secundario.

Otro cuerpo enterrado

También el domingo pero en la localidad bonaerense de Chascomús encontraron el cuerpo de Navila Serena Garay, de 15 años. Estaba desaparecida desde hacía cinco días y era intensamente buscada por la policía y familiares.

Por el femicidio fue detenido un hombre identificado como Néstor Garay. Según confirmó la policía de la provincia de Buenos Aires, la joven estaba enterrada en una casa vecina y ahora se está tratando de establecer el vínculo que el detenido tenía con la víctima.

Fuentes cercanas al caso detallaron que el dueño de la casa, ubicada en la calle Mercedes al 700, advirtió a los oficiales que Néstor Garay se había acercado a su propiedad y le había pedido permiso para «enterrar a un perro» en su jardín. En su declaración, aclaró que esta escena se produjo al día siguiente de la desaparición de la adolescente.

El último dato con que se contaba sobre los movimientos de la adolescente, era que había viajado en un remís hasta la casa de un hombre de 51 años. La madre de Navila, Dévora Garay, dijo que no conocía a esa persona ni cómo se había contactado con su hija.

La policía logró identificarlo y comenzó a buscarlo en varias propiedades hasta llegar a la quinta de este vecino. Una vez en ese domicilio, los peritos científicos excavaron el jardín y encontraron el cuerpo de la adolescente.