Orejeando el 2017. ADN

Como los jugadores que reciben sus cartas, los partidos políticos orejean mientras cuentan de reojo los porotos. Las manos son cada vez más pensadas por la cercanía del final. Algunos preferirán mantener lo logrado y sumar de a uno por la ventaja. Otros, tendrán que cantar falta envido y truco.

Esta semana, el Gobierno se volvió a fortalecerse en la Legislatura. Después del extenso conflicto docente, recuperó la agenda e impuso dos temas clave: el pliego para licitar el agente financiero y la emisión de Letras. Si bien requería de mayoría simple, sirvió para demostrar unidad interna y buena vecindad con un sector de la oposición. Pero esencialmente, para arrinconar al Frente para la Victoria a un respaldo para un nuevo endeudamiento, y partirlo (por primera vez) en la discusión por el agente financiero provincial.

Pero había un subliminal interés en la votación. Alberto Weretilneck gana tranquilidad los últimos meses del año. Logró financiamiento para sueldos y aguinaldos. Además, consigue fondos frescos para el año próximo, un año electoral.

En 2014, el gobierno atravesó una fuerte crisis política que remontó en 2015 y ganó las elecciones abrumadoramente. Ese repunte, luego de la ruptura con el FpV, tuvo dos vectores: una político y otro económico. El ascenso de Pedro Pesatti a la presidencia de la Legislatura fue un puntal. Otro, la renegociación de los contratos petroleros.

El año que termina fue crítico para la administración Weretilneck. Ahora, mira 2017 y piensa en otra recuperación. La económica está basada en una merma de la inflación, recuperación del consumo, aumento de la coparticipación, regalías del nuevo agente financiero, renegociación de concesiones como casinos y energía. ¿Hará una pata política? ¿Modificará su Gabinete? ¿Tendrá nuevos integrantes Juntos Somos Río Negro?.

Por ahora habrá reacomodo en la gestión. La última medición de Fernando Miodosky muestra una merma en los municipios comandados por el oficialismo. También, bajó la imagen positiva del gobernador y subió el rechazo a su administración. Los ministerios no fueron la excepción y aumentó la valoración negativa de la población, especialmente en seguridad.

Una rareza. Educación aparece como uno de los ítems cuestionado por la población, pero hay aprobación a los descuentos y a la nueva escuela secundaria y desaprobación al paro. La muestra estuvo realizada en pleno conflicto docente.

Así y todo algún abollón se llevó Weretilneck. La crisis docente, la puja salarial, el asesinato del policía Lucas Muñoz, las denuncias de la oposición, la falta de recursos, la complijidad de los sectores frutícolas y pesquero, entre otras, hicieron que la encuesta no haya reflejado los mismos números que la anterior.

De todos modos, la figura del gobernador sigue cosechando más de un 50% de aprobación. Es por lejos, el político con mejor imagen y adhesión.

En eso se sustenta el optimismo en el oficialismo que cree que -si no hay un cisne negro- en 2017 ganará la elección. Un dato: en Roca (bastión del jefe del PJ Martín Soria) la aprobación a Weretilneck subió al 45% y existe en esa ciudad una visión de más presencia del Estado rionegrino.

La clave, dicen en Laprida y Belgrano, es la defensa de los intereses de Río Negro.

El presidente Maurico Macri subió del 30 al 35% su imagen positiva. Y en la consideración, los partidos políticos ranquean así: JSRN, Cambiemos, FpV, PJ y UCR.

La oposición también juega. Cambiemos espera depurar su padrón y terminar de consolidarse. Para ello sigue con su plan de sumar («a los buenos») del radicalismo, el PPR y el Frente Progresista. La mirada está en 2019. Pero no pueden dejar de jugar en 2017, aunque sea un test difícil. Saben que deben romper la polarización actual entre Juntos y el FpV.

Los desafíos para el peronismo y sus aliados no es menor. La votación por el pliego del agente financiero dejó al descubierto su interna. Cuatro legisladores votaron con el gobierno. Y desafiaron el poder de Soria. Pero el jefe comunal de Roca no retrocede. Mantiene intactas las expectativas de promocionar a María Emilia en la cabeza de la lista a diputados nacionales y asegura que la crisis económica nacional complicará las chances de los candidatos del gobierno.

El dato de los economistas nacionales le dan la razón al Intendente. Será difícil una recuperación de la economía. No solo el desempleo es un desafío. También lo son las economías regionales. Esta semana el Gobernador viajó a Buenos Aires y presentó ante Macri y sus ministros un plan de recuperación de la fruticultura. No hubo respuesta contundente.

Por eso Weretilneck insistirá en la soberanía política y pretende alambrar la provincia y evitar la nacionalización de la elección.

Soria no es el único que cree que 2017 será complejo. El senador Miguel Pichetto pronosticó en la televisión nacional el mismo escenario. Y mandó al freezer su respaldo al proyecto de reforma constitucional hasta tanto estén dadas las condiciones.

¿Qué pasó desde aquel respaldo de agosto a hoy?. El gobierno nacional. Pichetto cambió su idea. Mira y no ve recuperación ni otorga cintura política al macrismo. Y cree -más que nunca- en la opción Massa. Ello cambia el escenario. Incluso, prefiere esperar a que pasen las elecciones de medio término. La irrupción de Florencio Randazzo en la provincia de Buenos Aires en acuerdo con Cristina Fernández de Kirchner puede cambiarlo todo.

Las condiciones nacionales -dice- pueden influir en Río Negro. Uno de sus fieles espadas en Río Negro razonó: Weretilneck empieza a caer en la consideración de la gente y nosotros tenemos que aparecer como opción de gobierno. Y eso se logra siendo responsables, no tira bombas.

Lo cierto es que Pichetto y Soria asimilan el escenario nacional a la suerte del gobierno rionegrino. Habrá que ver si existe en el electorado una percepción sobre que Weretilnck es Macri.

Por las dudas, el oficialismo pone distancia. Sigue marcando independencia de la Casa Rosada y solo admite contactos institucionales. El lema (las encuestas dan la razón) sigue siendo «en defensa de los intereses de los rionegrinos».

En el Parlamento quedó claro. El legislador Alfredo Martín cimentó el pedido de autorización para la emisión de Letras asegurando que la crisis financiera de Río Negro es culpa de la Casa Rosada. «No nos tienen en cuenta» dijo, y explicó que el proyecto económico ningunea a la Patagonia y está centrado en la pampa húmeda.

Hasta acá, razones le sobran a Martín. El campo es la única industria que crece. La eliminación de las retenciones lo favoreció. ¿Qué pasará en 2017?. Si avanza el proyecto de quitarle otro 5% a la soja, habrá 1.600 millones menos de ingresos al país, que está destinado a financiar obras en las provincias. Además, si se sigue corriendo el mínimo no imponible a la ganancias, afectará a la coparticipación.

Javier Iud retrucó: Coincidimos con el diagnóstico, pero no se hagan los distraídos. El FpV también critica las políticas económicas de la Casa Rosada, pero advierte que hay desmanejo de los fondos provinciales.

Todos juegan. Hay una nueva mano. Los parroquianos orejean los naipes, miran los porotos y piensan. Ya será momento de jugar las cartas.