Impacto de las políticas de Cambiemos en Río Negro. Caída de la actividad y discriminación fiscal

Un documento producido por el Centro de Estudios de la Patagonia (CEP) titulado: ”Impacto de las políticas de Cambiemos en Río Negro. Caída de la actividad y discriminación fiscal, elaborado por el economista Claudio Scaletta (Coordinador del área de Economía y Desarrollo Regional del CEP), analiza minuciosamente la caída de la recaudación provincial producto de una inflación anual del 45%. La recaudación propia en Río Negro creció nominalmente un 37,4% (de 2.092 millones de pesos a 2.874 millones) sin embargo estos valores indican una pérdida de ingresos reales del 5.5% en el primer semestre 2015 con una tendencia clara a acrecentar la brecha.

Respecto a la Coparticipación Federal de Impuestos (CFI), este trabajo destaca que la contracción de ingresos provinciales no sigue un camino de proporcionalidad, puesto que las transferencias interprovinciales favorecieron a ocho distritos en desmedro del resto de las provincias a través de diversas vías.

Sólo en la obra pública proyectada, el 73,8 por ciento del total presupuestado en 2016 será destinado a obras situadas en la ciudad de Buenos Aires (CABA) y la provincia de Buenos Aires (PBA), y el 12,7 al resto de las provincias, con la particularidad que Chubut, Santa Cruz, Formosa, Chaco y Misiones no tienen ninguna obra asignada. En ese contexto, Río Negro recibirá inversiones por el 0,3 por ciento del total proyectado.

El estudio producido por el Centro de Estudios de la Patagonia, traza tres ejes para el análisis del diagnóstico de la economía rionegrina actual donde se observan cambios cuantitativos que reflejan la discriminación de la provincia patagónica en el reparto nacional:

Comparación de los recursos fiscales que llegan de Nación. A grandes rasgos, la provincia sólo recauda un tercio de los recursos que consume, lo que determina su alta dependencia de los fondos nacionales.

La discriminación de Río Negro en el reparto. La coparticipación de Río Negro cayó con los mayores recursos recibidos por las provincias que se beneficiaron con la devolución judicial del 15 por ciento y por los adelantos que favorecieron a las provincias aliadas de la administración central.

El tercer dato, que se notará con mayor fuerza en los próximos 3 años, surge de quedar prácticamente afuera del plan nacional de obras por 100 mil millones de pesos hasta 2019 y del que la provincia sólo recibirá el 0,3 por ciento.

Ante el panorama de retracción de ingresos, durante la primera semana de agosto el gobierno anunció que finalmente efectivizaría la transferencia a las provincias 37 mil millones de pesos adicionales durante la segunda mitad del año. Se trata de la primera etapa de la devolución del 15 por ciento de la CFI que era retenida por la Anses y que comenzó a devolverse en forma asimétrica a partir del fallo de la Corte Suprema de Justicia de noviembre pasado. A pesar de tratarse de un ingreso extraordinario, que antes no existía, la situación fiscal global de la provincia no experimentará por ello una mejora. Si se anualizan los 6.200 millones de coparticipación recibidos en la primera mitad del año, los mil millones adicionales sólo representarían un crecimiento nominal del 8 por ciento.

Si se suman todas las detracciones que sufrió Río Negro desde la asunción de Cambiemos resultan por lo menos llamativas las declaraciones del gobernador Alberto Weretilneck entre funcionarios nacionales destacando el nuevo “federalismo y clima de diálogo” en contraposición a los “férreos manejos discrecionales del pasado”.