Iglesia y sindicatos preocupados por los derechos de los trabajadores

Dirigentes de las cinco centrales sindicales se reunieron con los obispos de la Pastoral Social, con los que hablaron de los despidos y el aumento de los precios. El encuentro se realizó a días de que las tres CGT y las dos CTA realicen una gran marcha unitaria contra las medidas de ajuste del gobierno de Mauricio Macri.

El vicepresidente de la Pastoral Social, Jorge Casaretto, hizo un gesto de auspicio a la unidad de las centrales y remarcó que la Iglesia comparte con los gremios la preocupación por “los derechos de los trabajadores, la inclusión social y los jóvenes”.

La reunión –un desayuno de trabajo que se realizó en la sede de Azopardo 802– se concretó como parte del calendario de encuentros que la iglesia hace cada año, de manera previa a la convocatoria de la Semana Social, que esta vez se realizará en Mar del Plata entre el 20 y el 21 de mayo. Sin embargo, el escenario de unidad sindical frente a los despidos le dieron otra repercusión.

En el edificio de la CGT Azopardo estuvieron su titular, Hugo Moyano, Antonio Caló (CGT Alsina) y Hugo Yasky (CTA de los Argentinos), mientras que Luis Barrionuevo (CGT Azul y Blanca) y Pablo Micheli (CTA Autónoma) mandaron representantes. También participaron Sergio Palazzo (bancarios), Gerardo Martínez (Uocra), Juan Carlos Schmid (Confederación del Transporte), Roberto Baradel (docentes), Claudio Marín (telefónicos), Gerónimo Venegas (Uatre), Omar Plaini (Canillitas) y Andrés Rodríguez (UPCN), entre otros.

En representación de la Pastoral Social, además de Casaretto, fueron el obispo Fernando Maletti y el sacerdote Luis Lagazio, asesor eclesiástico de los Nuevos Dirigentes, entre otros.

Los temas centrales fueron tres: despidos, inflación y el problema del narcotráfico y las drogas, traído a la mesa raíz de las muertes por intoxicación ocurridas durante el fin de semana en la fiesta de música electrónica de Costa Salguero.

En este marco, Caló se mostró “preocupado” por las subas de precios y tarifas y dijo que las medidas sociales anunciadas el sábado por el presidente Mauricio Macri “son paliativos, pero no alcanzan”. El bancario Palazzo coincidió en calificar como “exiguo” lo prometido por el gobierno de Cambiemos, mientras que el secretario adjunto de la CTA Autónoma, José Rigane, contó que en el encuentro se expresó el reclamo común de “terminar con el ajuste económico”.

“La importancia del encuentro de ayer reside en la posibilidad de incorporar a un actor como la Pastoral Social al intento de construir un consenso contra el ajuste que el gobierno está aplicando en la Argentina”, señaló por su parte Yasky, quien ratificó que las cinco centrales obreras movilizarán a la marcha del 29 de abril contra los despidos.

Fuentes de la Pastoral Social valoraron que hayan estado representadas las cinco centrales y calificaron el encuentro de “excelente” y con un “nivel de diálogo y compromiso muy alto”.

Los obispos dieron señales del apoyo de la Iglesia a la búsqueda de unidad sindical. “La relación entre la iglesia y el mundo del trabajo es histórica. De este modo nos unimos al papa Francisco en la construcción real de la cultura del encuentro. La Semana Social está a disposición de ustedes para presentar la unidad en la que ya están trabajando”, dijo Casaretto en el encuentro. El obispo Maletti sostuvo que el papa Francisco “nos pide ser un hospital de campaña e ir hacia las fronteras”, y en ese sentido consideró la reunión fue “un aporte para el país”.