Análisis y proyección del voto
Roca.– La forma habitual de reducir la incertidumbre a días de las elecciones provinciales son las encuestas. Otra forma es observar qué puede pasar con los votos a partir del comportamiento electoral de elecciones pasadas y proyectar escenarios posibles. Trabajar en la proyección de los votos supone evaluar el peso territorial de las construcciones partidarias y cómo puede incidir la fidelización del voto en el resultado final.
Daiana Neri, docente e investigadora de UNRN-UNCOMA, plantea -en un trabajo publicado por el sitio web del diario Río Negro- observar qué puede pasar el domingo próximo en Río Negro con los votos a partir del comportamiento electoral de elecciones pasadas y proyectar escenarios posibles.
Río Negro alcanzó en el 2015 un padrón de 505.000 electores, pero se estima concurran a la elección un 75%, que son unos 375.556 electores. Sobre esa concurrencia y teniendo en cuenta el promedio desde 1983, un 4,7% votará en blanco, mientras que un 1,5 emite un voto nulo. La opciones de izquierda mas tradicional como el Partido Obrero y el Partido Comunista en general capturaron desde 1983 un promedio de 2,17. De esta manera unos 347.000 votos podrían repartirse entre los candidatos a gobernador que disputaran la elección.
Un primer escenario para el 14J15 resulta de proyectar los caudales electorales municipales obtenidos por los partidos el 03M15 y en las elecciones del 2011. En esta simulación el FPV obtendría un 42,1% (145.100), JSRN un 21,2% (73.252 votos), la UCR un 16,1% (55.445), CC-ARI-PS un 9,5% (32.815) y el PRO-PPR un 2,6% (9.116).
Estos número se distancian bastante de lo que la mayoría de las encuestas estiman: una polarización entre Pichetto y Weretilneck. Pero ese primer escenario será la referencia para pensar dónde pueden sumar y restar las fuerzas políticas para recrear un escenario de polarización, ejercicio que los políticos realizan previamente al diseño de la estrategia electoral.
Para acumular preferencias el candidato de JSRN aborda una campaña compleja y de alto nivel de incertidumbre respecto a su efectividad porque necesita captar electorado muy diferente para sumar los votos que necesita. Debe segmentar su discurso y estrategia, para hablar tanto a los votantes radicales (que tienen su histórica lista 3 para votar en esta elección), a los votantes peronistas (de aquella localidades donde el FPV perdió alineamiento), a los antikirchneristas (para restarle a Magdalena Odarda), y también a votantes que adhieren al gobierno nacional (para no perder votos del FG de Bariloche por ejemplo). Pero Weretilneck no puede sacarle todos los votantes a la UCR ni tampoco todos a Odarda, por lo tanto su estrategia debe centrarse también en limar las construcciones locales del FPV que es dónde está centrada su capacidad de ganar elecciones.
El FPV tiene mucho a favor: un electorado más definido que desde el 2011 viene apoyando a la fuerza política en las elecciones de todos los niveles de gobierno, ser gobierno en la mayoría de las localidades, el apoyo de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner que goza de alta imagen positiva en la provincia, el apoyo de los candidatos presidenciales que también miden bien. Pero no tiene algo que Weretilneck está usando como su principal estructura partidaria: el gobierno del Estado provincial.
Veamos qué podría pasar en las principales ciudades de los 8 circuitos electorales.
En el circuito Alto Valle Oeste, Pichetto solo mantendría una perfomance similar a las elecciones del 3M15; hay un límite en las posibilidades de crecimiento en Cipolletti y Cinco Saltos, eso no lo permite sumar. En cambio Weretilneck aumentaría su caudal electoral con las preferencias de Cipolletti donde podría sumar unos 15.000 votos.
En Alto Valle Centro si Pichetto logra repetir en Roca la perfomance del 2013 (49,5%) puede perder algo así como 11.300 votos respecto a los 36.000 del 3M2015. Weretilneck para aumentar los 6.300 que obtuvo en mayo puso a caminar la ciudad a quien encabeza la lista por el circuito, Alejandro Palmieri, a Norma Torres y Nelson Ayenao. Esta estrategia podría dar un aumento significativo (arribar a los 9.000) solo si Odarda no logra retener algo de lo que logró en el 2013. Weretilneck también apuesta a captar algo del voto antiK a partir de su incidencia en el conflicto frutícola. En Allen el FPV pierde fuerza con el alineamiento de la intendenta, en cambio JSRN puede sumar también adhesiones de la UCR.
En el Alto Valle Este el pulso lo marca Regina, donde Pichetto y Weretilneck podrían repetir el mismo escenario que en mayo. Puede que las diferencias internas en el PJ de nuevo incidan en los cortes de boleta, que esta vez podrían afectar a los candidatos circuitales del FPV. El peronismo también puede perder votos en Mainqué por un distanciamiento de Petricio de las filas pichettistas y Weretilneck puede sumar voto radical en Huergo.
En Valle Medio el FPV tiene más consolidado Choele Choel, donde podría sacarle a Weretilneck unos 2000 votos de diferencia, pero puede perder preferencias en Río Colorado por la fragmentación del PJ y una gestión sin muchas luces. También en Lamarque y Beltrán se puede complicar por los alineamientos de los intendentes con el gobernador. En el caso de Beltrán el intendente Apud encabeza la nómina de legisladores del circuito. Pero la incidencia negativa de Ricardo Arroyo, candidato a legislador oriundo de Lamarque, por su responsabilidad como ministro en el caso de los abusos de chicas del CAINA de Viedma, podría afectar la perfomance de JSRN en el circuito.
Viedma es la batalla central del circuito Valle Inferior. Pichetto tiene a favor que Weretilneck, Odarda y Masaccessi van a disputar los votantes que no se identificaron con el FPV en las elecciones del 3M15. Para Weretilneck, sumar votos y polarizar no se presenta fácil. La lista 3 de la UCR está encabezada por Masaccessi que reside en Viedma, y la lista poblacional la encabeza Darío Berardi, referente más importante de Foulkes dentro del radicalismo. JSRN tiene a favor allí su acercamiento con Scalesi y UPCN. En Conesa también sumará algo aunque poco el gobernador porque en mayo no presentó candidato.
En los circuitos Atlántico y Línea Sur es donde Weretilneck apuesta a cosechar más voto radical. Aquí puede sumar las adhesiones de los intendentes radicales que pudieron renovar su mandato donde JSRN colaboró no presentando candidatos propios en el 03M2015, como Los Menucos, Maquinchao, Comallo, Valcheta, Ñorquinco. No obstante el FPV va a liderar en el Atlántico con lo que aporta San Antonio Oeste. En la Línea Sur las elecciones simultáneas en Comisionados de Fomento podrían gravitar para que sea JSRN quien lidere ese circuito.
El circuito Andino es el que presenta mayor incertidumbre y allí está la ciudad con más cantidad de electores (Bariloche representa el 16% del padrón electoral provincial). Las últimas elecciones locales del 2011 presentó una fuerte fragmentación; el sistema de partidos de Bariloche contenía una cantidad de opciones difícil de encontrar en el resto de la provincia. Por eso, es difícil estimar dónde pueden ser depositados esa cantidad de votos; 16.000 votos volátiles que pueden ser claves para definir la elección.
En Bariloche Weretilneck puede superar la marca del FPV local si logra captar algo del desaparecido partido SUR tras la figura de Arabela Carreras, el crecimiento de Pueblo y el menor caudal del FG, que perdería voto K con los vaivenes del gobernador. Pero Odarda en general hace buenas elecciones en Bariloche y podría restarle votos a Pueblo también, lo que podría ayudar al FPV para encabezar el comicio. El FPV solo con el PJ en el 2011 obtuvo en las elecciones locales un 21% (13.100 votos hoy) pero en 2013 Pichetto sumando al FG marcó un 48,5%. Tiene a favor la imagen de Silvina García Larraburu, la gestión de Maru Martini y el voto K que pierde parte del FG. Eso le permitiría alcanzar un 30% con unos 19.500 votos.
El FPV podría ganar el circuito con la suma de votos peronistas en El Bolsón. Weretilneck tiene un límite para crecer en esa localidad y es la postulación de Barbeito como tercero en la lista poblacional de la UCR. No obstante no se descartan cortes de boletas de los votantes radicales que combinen con el candidato a gobernador de JSRN.
En síntesis, el FPV si bien bajaría el caudal electoral podría retener un 38% con 132.400 votos aproximadamente. JSRN podría acumular un 33% de los votos (116.900 aprox), y estaría a 15.500 de ganar la elección.
Alguien se preguntará ¿para qué sirve este tipo de trabajos? Este análisis quiere brindar información sobre las posibilidades que tienen de sumar y restar votos los partidos a partir de sus construcciones territoriales que en general en las encuestas de opinión no ponen tan a prueba. Pero muchos factores no son tenidos en cuenta en un análisis como éste, porque no mide de manera precisa el termómetro de opinión pública que sí ponderan las encuestas. Por ello cuesta mensurar qué efecto real tiene en el electorado una campaña como la que diseña Weretilneck, centrada principalmente en los recursos que el Estado rionegrino puede proveer para acercar su imagen a los rionegrinos que desconocían hasta no hace mucho su figura, gestión, pertenencia e historia partidaria.
Solo resta esperar. El éxito y el fracaso de los estrategas los veremos el día de la elección.
Docente-Investigadora UNRN-UNCOMA