Pichetto sobre corrupción de menores: «Hay responsabilidad institucional»

Bariloche.- El senador se refirió al caso de prostitución infantil en Viedma. Señaló que el Estado tiene el deber de «cuidar y proteger». Y remarcó que las víctimas estaban bajo tutela del Ministerio de Desarrollo Social.

Para el senador Miguel Pichetto, existe «responsabilidad institucional» en el caso de prostitución infantil de jóvenes institucionalizadas en el ministerio de Desarrollo Social de Río Negro.

En diálogo con la agencia ANB remarcó que «el Estado estaba a cargo de la tutela de las chicas judicializadas que se encontraban en un CAINA (Centro de Atención Integral de Niños y Adolescentes)» de Viedma».

El candidato a gobernador de la Provincia aclaró que también hay «una responsabilidad de tipo penal». Sobre este punto, sostuvo que «la trata de personas, la corrupción de menores y la inducción a la prostitución», son todos delitos de gravedad que la Justicia deberá investigar. «Esperemos que se pueda probar este hecho», confió Pichetto el sábado pasado, durante su paso por Bariloche.

La denuncia por prostitución infantil de las chicas institucionalizadas generó el desplazamiento del ministro de Desarrollo Social, Ricardo Arroyo, quien dejará su cargo el 20 de abril para convertirse en candidato a legislador provincial en las elecciones del 14 de junio próximo. Su reemplazante será Fabián Galli, ex intendente de Contralmirante Cordero y actual presidente de Radio y Televisión Rionegrina.

Arroyo resultó muy golpeado por la información que salió a la luz tiempo atrás sobre prostitución infantil contra un grupo de chicas que se encontraban bajo el resguardo de la cartera que aún conduce. La Justicia analiza el caso, en el que están imputados trabajadores del organismo, un juez y distintas personalidades de la capital provincial.

Por su parte, el gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, minimizó la responsabilidad del Ejecutivo en el suceso. Ante la consulta de este medio, dijo que «sólo una» de las niñas y presunta víctima «estaba institucionalizada».

El resto, «no estaba bajo la tutela absoluta del Estado, podían salir y entrar, tenían un régimen abierto», justificó.»No vivían en los institutos, no estaban bajo protección estatal las 24 horas», agregó