Cipolletti: alumno de 7º golpeó a tres maestras

Cipolletti.- Un grupo de docentes podría renunciar a la Escuela 199 tras una violenta agresión que tres maestras sufrieron por parte de un alumno de séptimo grado con reiterados antecedentes de violencia y amenazas.
La posibilidad de alejarse de los cargos, sin embargo, no sería exclusivamente por los conflictos con el adolescente sino también ante la «falta de apoyo» de las autoridades del Ministerio de Educación.
Ayer, supervisores de nivel primario concurrieron al establecimiento, pero se negaron a brindar información sobre el ataque a las educadoras. A través de una empleada de la institución intentaron desmentir el ataque, aunque expresaron que «estaban analizando» lo sucedido.
Fuentes policiales confirmaron que el martes, a primera hora, un patrullero debió concurrir al lugar porque un menor había golpeado fuertemente a varias maestras que intervinieron cuando él le pegaba a otro alumno. Además, las habría amenazado con «ir a buscar un arma y volver para matarlas».
El violento episodio no fue el primer incidente protagonizado por el niño, por lo que parte del plantel docente manifestó su descontento con las autoridades educativas cipoleñas. Varias maestras del establecimiento del barrio Pichi Nahuel confirmaron ayer la existencia del hecho, pero evitaron brindar mayores precisiones por temor a ser sancionadas. «Nos dijeron que nos van a suspender si lo hacemos público, y que además van a desmentir todo», coincidieron.

El ataque
A pesar del clima de temor a represalias, hubo quienes sí detallaron lo ocurrido. «Antes de entrar a clases él encerró a un grupo de chicos en un baño, y movió un armario para bloquear la puerta. Cuando lograron salir, comenzó a increpar a uno de ellos y lo fue a buscar, por lo que se pelearon», relató una testigo.
En ese momento intervinieron dos docentes, a las que el adolescente golpeó hasta provocarles lesiones óseas en las manos y brazos. Una persona que se involucró para frenar la golpiza también recibió puñetazos.
La situación no se calmó ya que el estudiante rompió un vidrio de la puerta de la cocina «y quería ir a buscar al otro chico para cortarlo». Luego, «nos gritaba que iba a ir a buscar un arma y volvería para matarnos», según se expresó.
Por el hecho, las damnificadas concurrieron a la sede de la Comisaría Cuarta en forma personal, sin acompañamiento ni de los directores de la Escuela 199, ni de Educación. Fue la segunda exposición policial contra el menor en pocos días. La semana anterior «se escapó, robó naranjas y volvió como si nada hubiese pasado», se detalló.
En 2012, contaron miembros del plantel docente, habría amenazado de muerte a una maestra suplente si no lo promovía de sexto a séptimo grado.

Medidas
«Esto es muy grave como para que se lo quiera tapar», se afirmó. Los docentes piden que Educación nombre un maestro domiciliario para que el menor no pierda la escolaridad, aunque plantearon sus reparos a su continuidad dentro de la primaria. La postura del Consejo Escolar sería mantenerlo dentro de la institución para brindarle contención.
«Hay 130 alumnos y tenemos que pensar en su seguridad. El otro día, cuando él tiraba bancos, había niños de jardín y debemos garantizar que no les pase nada», se quejó una profesional que expresó que aún ante los constantes planteos, es mínimo el abordaje de la problemática desde el ETAP.
Ante esa situación y las presiones para no denunciar lo ocurrido, varios de los profesionales que dictan clases en el Pichi Nahuel evaluarán hoy su continuidad en el establecimiento. No descartaron pedir licencias o renunciar a sus cargos.

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