Encuentro del tercer tipo. ADN

Mucha ingenuidad para hacer creíble que solo fue un encuentro de elogios. La foto de Aníbal Tortoriello y María Emilia Soria se explica únicamente desde la política, donde no hay casualidades, sino mensajes y definiciones. Muchos piropos, para pronosticar un casamiento. ¿Se podía haber evitado o mantenido en reserva? Si, pero el propósito era diferente, aún con “daños colaterales”, como es el caso de Silvia Horne.

¿Era necesaria a una semana de las elecciones? Las respuestas se encuentran en la difusión que hizo primero en las redes el propio candidato de Cambia Río Negro (¿consultó a Soria?) y luego, los candidatos y dirigentes de Tortoriello, que rápidamente retransmitieron la foto en Instagram y en Facebook.

Las explicaciones de María Emilia Soria, fueron «de ocasión», eran necesarias, pero se contradicen en si mismo y el clima electoral le baja el precio. Argumenta sobre la necesidad del «diálogo entre los políticos», pero cuestiona «otros consensos» en su elección.

No es nuevo este vínculo. El 22 de diciembre de 2022, esta agencia publicó en su comentario dominical la existencia de reuniones de referentes del sorismo, que de la mano de Claudio Thieck, llegaron al diputado nacional. Se mencionó específicamente de reuniones con Leandro Costa Brutten, actual vicegobernador en la fórmula con Silvia Horne y Estanislao Cazaux, abogado de la familia Soria. Ambos, dirigentes de la conducción de la Unidad Básica en Acción, de Bariloche, que responde al sorismo. El propio Tortoriello reconoció en ese momento los encuentros.

La mayor exposición de la foto es para la intendenta de Roca. Tortoriello agradecido ante la escasez de votos, pero, sin embargo, a María Emilia Soria, esta imagen le diluye sus críticas al PJ orgánico, por su alianza con Alberto Weretilneck, cuando se fotografía con el mayor referente provincial del neoliberalismo macrista y el verdadero adversario del peronismo a nivel provincial y nacional.

Tampoco es sencillo para Silvia Horne. Se supone que habrá pedido explicaciones a su compañera de ruta en el armado de Vamos con Todos.

Una foto innecesaria, cuando además María Emilia Soria era observada por sectores del peronismo disidente por el acuerdo con JSRN, como una referente con futuro y con un caudal territorial propio ratificado el 12 de marzo.

La intendenta ya tuvo alguna resignación cuando el Movimiento Evita puso a su candidata a la gobernación. Acompañó a Horne a la Casa Rosada -a posar en otra fotografía- que también podría tener consecuencias políticas el 17 de abril. Compartió ese escenario con su hermano Martín y el Chino Navarro y definió su posición en la interna nacional junto al Presidente, contra el kirchnerismo.

No pudo o no quiso, convertirse en la conducción del espacio opositor interno. ¿Dejó pasar la oportunidad? Achicó su espacio, no sumó y restó. Dejó de lado a Gustavo Casas, a quien había prometido apoyo, quizás por sus vínculos con el Instituto Patria y con Oscar Parrilli. Lo negó “antes que cante el gallo”.

Pero, esta foto permite especular con otros hechos, como la debilidad del candidato a intendente de Roca, elegido por Cambia Río Negro, que sólo hizo “cosquillas” a la candidata de Pasión por Roca, dejando sospechas de un acuerdo previo local,

Existe otro mensaje y está referido a las sospechas que pesan sobre Tortoriello y el sorismo de agitar el conflicto policial en la provincia, dadas por las relaciones con el policía retirado Rubén Muñoz, en General Roca, como con dirigentes y candidatos de Cambia Río Negro, que no dudan en aparecer públicamente en apoyo a los policías, con epicentro en Viedma.

También se puede observar la presencia de policías en los actos públicos de Cambia Río Negro y Vamos con todos.

María Emilia desconcertó, tanto como cuando votó, en el 2017, siendo diputada nacional, por el desafuero de Julio De Vido. En ese momento jugó una interna, que finalmente no dio frutos al proyecto provincial de “ser políticamente correcta” y su hermando Martín fue derrotado en el 2019, en la competencia por la gobernación. Sacó el 35% de los votos, contra el 52,6% de Arabela Carreras.

Los fuegos cruzados en el orden nacional no suelen traer buenos beneficios en las provincias. El presidente de la Nación, hoy con malos números en Río Negro, invitó a Olivos a Horne y Soria, otra ocasión para una foto, y felicitó a la intendenta por el triunfo electoral por su reelección. En su tránsito a la posible candidatura por la reelección busca aliados.

Envía a sus ministros y funcionarios nacionales en apoyo a Silvia Horne, como Tolosa Paz y a su ex Ministra de Seguridad, Frederick -en medio del conflicto policial- y siempre en compañía de la senadora Silvina García Larraburu.

La candidata de Vamos con Todos, piensa en su performance electoral del próximo domingo y ahora después de la foto tiene argumentos para pedir al sorismo lealtad, trabajo y militancia detrás de su figura. Los números hablarán en cada circuito y localidad.

Si el resultado de las elecciones del próximo domingo, será como predicen las encuestadoras, o en números aproximados, habrá espacios para varios reclamos y pases de boletas.

Se abre una nueva etapa.