La UCR definió fechas de internas y debate políticas de alianzas

(ADN). – El Plenario de Delegados al Comité Central y la Mesa de la Convención del radicalismo de Río Negro definió realizar elecciones internas para el 11 de abril del 2021 y quedó sin efecto la resolución del Comité Central conducido por Lorena Matzen, que había prorrogado por un año el mandato de las actuales autoridades partidarias.

Frente a lo que puede definirse como un simple trámite administrativo, la resolución de ayer tendrá repercusiones políticas en la provincia donde –como sucederá en todo el país- el debate de fondo en la UCR será su continuidad, en el frente macrista de Juntos por el Cambio, aliados al PRO y el ARI, en el marco de un debate nacional donde el radicalismo observa pocas chances de seguir en esa alianza, y piensa resolver el dilema dejando libertad de acción a los distritos para que en cada provincia el partido defina por sí mismo su posición frente a las elecciones nacionales del año próximo.

En abril el radicalismo elegirá convencionales nacionales; delegados al comité nacional; convencionales provinciales; delegados al comité provincial y autoridades de los comités locales.

En un comunicado la Mesa Directiva de la Unión Cívica Radical de Río Negro, ratificó “su vocación de diálogo y trabajo, así como la comprensión de la difícil situación sanitaria por la que atraviesa la provincia”.

En este marco aún se desconoce en qué situación se encontrará Río Negro en abril del año próximo respecto a la pandemia, para concretar las votaciones internas del radicalismo, un aspecto que sin dudas tendrá que definir el ministerio de Salud de la provincia.

El radicalismo también tiene puesta la mirada, no sólo en definir su estrategia electoral para las elecciones intermedias nacionales 2021, sino que analiza su participación en la renovación de autoridades el año que viene en 11 municipios de Río Negro, si bien todos chicos y de relativo peso en función de los comicios, pero donde no hay ninguna referencia del PRO y el ARI.

Las elecciones del 11 de abril del año próximo no sólo definirán quienes conducirán al radicalismo rionegrino, sino fundamentalmente su destino con miras al 2023 y la futura alianza electoral, que tiene dos opciones insistir con el macrismo o refugiarse en el espacio provincial con Juntos Somos Río Negro y volver a recuperar algún protagonismo “en el pago chico”, con destino de poder.