Otra provocación o una forma de pensar: Macrismo y dictadura

(ADN).- El director de la Aduana, Juan José Gómez Centurión, afirmó anoche que la última dictadura cívico-militar «no fue un plan sistemático para desaparecer personas, ni un genocidio», y cuestionó que «no fueron 30 mil», sino 8.000 los desaparecidos durante ese período.

«En términos históricos, no es lo mismo 8.000 verdades contra 22.000 mentiras», precisó Gómez Centurión en declaraciones al canal América.

El funcionario, que fue desplazo y reincorporado por una denuncia de contrabando y corrupción en la Aduana, se sumó ayer al ala dura del macrismo que cuestiona el proceso de memoria, verdad y justicia. Por declaracione similares, el funcionario porteño Darío Lopérfido fue desplazado de su cargo.

Las declaraciones de Gòmez Centurión se dan en pleno debate por la «movilidad» del feriado del 24 de marzo.

El funcionario indicó -en una entrevista- que «fue una reacción desmedida combatiendo un plan de toma del poder concretamente». Además, negó que la dictadura haya llevado a cabo un genocidio y justificó el accionar del dictador Alfredo Astiz al considerar que «cumplió órdenes».

«Vos estás diciendo que fue un plan genocida, yo no comparto esa visión de la historia. Fue una reacción desmedida combatiendo un plan de toma del poder concretamente», precisó el director de la Aduana en respuesta a un diálogo con la periodista Romina Manguel, a quien tildó de «militante».

Gómez Centurión señaló que «se generó un plan caótico, no sistemático» en la década del 70 y agregó que lo ocurrido en ese período «fue una desgracia».

«Yo no creo que haya sido un plan para hacer desaparecer una persona. Fue un torpísimo golpe de Estado, tomando el poder y lidiando contra un enemigo que no sabían cómo manejarlo y que había arrancado en el 75 con una orden constitucional de aniquilamiento», aseguró el veterano de Guerra de Malvinas.

Por otra parte, aseguró que «(Leopoldo) Galtieri fue un personaje de la historia que nadie va a recordar» y precisó que no se arrepentía de nada de lo que dijo este domingo porque era su «punto de vista».