«No podemos asegurar que haya habido corrupción o sobreprecios»

(ADN).- El jefe de Vialidad Nacional en Río Negro, Raúl Obieta, le bajó el tono a las denuncias de corrucpión en la obra pública. «No podemos asegurar que haya habido corrupción o sobreprecios», dijo. «Salvo que hayan pruebas o un arrepentido».

Obieta se concentró en las obras futuras más que en lo realizado. Aseguró que el organismo está centralizdo en Buenos Aires y que «moverlo» es «pesado y burocrático». Y anunció que a fines de 2017 la ruta 23 estará finalizada al 98%.

El funcionario dijo que esa traza fue planificada precariamente y su construcción se basó en ante proyectos, lo que dificulta la aprobación y certificaicón de los tramos. Sin embargo, aseguró que la intención es «avanzar», producto de lo que se irán rearmando los planos, lo que implica ampliar la obra, volver a licitar y agrandar el presupuesto. Esto retrasará la finalización.

Obieta ejemplificó: «Nos encontramos con mallines entre Pilcaniyeu y Dina Huapi que no estaban previstos. Eso implica relicitar obras» debido a los cambios que implica.

Un dato sobre la dicotomía entre pasado y futuro. El funcionario comentó que la obra tiene previsto tres puentes ferroviarios. Dijo que es «discutible» por la frecuencia de paso del Tren Patagónico, aunque admitió que suma a la seguridad vial porque evita el cruce de vehículos sobre las vías. «En el presupesto global no es mucho, los vamos a dejar». Esos puentes suman 100 millones de pesos, y el monto total de la obra es 3.500 millones de pesos.

Sobre el tramo de la ruta 251 que une las ciudades de General Conesa y San Antonio Oeste, el Jefe del Distrito 20 adelantó que -de acuerdo a estudios- habrá que reencarpetarla. Aseguró que las fallas que surgieron fueron producto de un «mal cálculo» en la mezcla del cemento, pero descartó que haya sido para «ganar» dinero. Y adelantó, que la empresa se hará cargo de la obra sin que ello implique ningún gasto para el Estado, porque la obra está en garantía.

El funcionario también se refirió a la rotonda de ingreso a San Antonio, el puente ferroviario y el ingreso a Las Grutas. «Es una obra faraónica» criticó. «Descabellada». «Quienes la planificaron se excedieron», dijo. De todos modos, garantizó que se culminarán. Para ello se replanificarán los accesos y será menos «pretenciosos».

Obieta convocó a una conferencia de prensa para explicar alguna de las publicaciones que surgieron en estos días sobre el estado de las rutas y los presuntos sobreprecios o actos de corrupción. Lo curioso es que no permitió el ingreso de cámaras de televisión porque le da pánico escénico: «Soy nuevo en la función pública y no quiero salir en las radios ni en la televisión porque me pongo nervioso», se justificó.