El Gobierno abandona el directorio del canal suramericano TeleSur

El Estado argentino ya no integrará la sociedad propietaria de Telesur, la señal multiestatal de noticias que emite desde Caracas. Con el lema, «nuestro norte es el sur», la señal nació en 2005 con el objetivo de ser una voz alternativa al flujo informativo «hegemónico» y «neoliberal».

Tras varias semanas de análisis jurídico, el ministro de Medios y Contenidos Públicos, Hernán Lombardi, y el secretario de Comunicación Pública, Jorge Grecco, resolvieron abandonar La Nueva Televisión del Sur C.A., la compañía estatal integrada por los gobiernos de Venezuela, Cuba, Ecuador, Bolivia, Nicaragua, Uruguay y, hasta ahora, Argentina (que tenía el 16% de las acciones). Lombardi y Grecco confirmaron que «acordaron iniciar el trámite correspondiente para dar por finalizada la participación del Estado Argentino en Telesur» y notificaron de esa decisión a la ministra de Relaciones Exteriores, Susana Malcorra.

Lombardi y el secretario de Medios Públicos, Jorge Sigal, mantuvieron varias conversaciones telefónicas con la presidenta de Telesur, Patricia Villegas, para anticiparle la decisión que ya era esperada por el gobierno bolivariano, con el que el presidente Mauricio Macri está enfrentado desde antes de asumir por su reclamo de libertad a los presos políticos en Venezuela. La desvinculación también implica que Telesur dejará de emitirse en la plataforma estatal televisión digital abierta, que llega a más del 80% de los habitantes, y también dejaría de ser de inclusión obligatoria en las grillas de todos cableoperadores del país.

«Nuestro país no tenía ninguna injerencia en los contenidos de la señal ni en su gerenciamiento. Esta determinación va en línea con lo que nos hemos propuesto para los medios públicos en términos de pluralismo y austeridad», resumió las razones de la decisión el ministro Lombardi, que había anticipado este paso en diciembre pasado. La Argentina se convertirá así en el primer socio fundador en salir de Telesur, que en 2015 cumplió su primera década al aire. Se desconoce cuál fue la inversión del Estado argentino en la puesta en marcha del canal -que se distribuye gratuitamente via satélite a América, Europa y Asia y que carece de ingresos publicitarios-, pero en los últimos dos años ese gasto se limitó al mantenimiento de la sucursal de la emisora en Buenos Aires, donde trabajaban unas diez personas.

Hasta diciembre pasado, la representante argentina en la empresa fue Carolina Silvestre. En tanto, el corresponsal de la señal es el periodista, cineasta y ex combatiente de la Guerra de Malvinas Edgardo Esteban.