Tras la ruptura del kirchnerismo, fuertes cruces entre los diputados

Luego de horas de reuniones, el bloque de diputados nacionales del Frente para la Victoria (FpV) perderá al menos 12 integrantes dado que un grupo de legisladores encabezados por Diego Bossio y Oscar Romero decidió apartarse y conformar su propio bloque «Justicialista».

Al respecto, los diputados que abandonaron el FpV señalaron en un comunicado: «Es nuestro deber llevar adelante una oposición responsable desde el espacio político institucional que se nos ha confiado en el Congreso Nacional. Nos opondremos con todas nuestras fuerzas y seremos implacables ante proyectos o medidas que consideremos contrarias al bien común y a los intereses nacionales, o cuando a través de ellas se quiera menoscabar la justicia social, la dignidad del trabajo y los derechos de todos los trabajadores».

«Acompañaremos con nuestra acción a todos los gobernadores justicialistas y junto a ellos garantizaremos la gobernabilidad de cada una de las provincias gobernadas por nuestro partido, realizando así, nuestro aporte a la gobernabilidad nacional», continúa el texto.

Por su parte, consultada por el accionar de los diputados díscolos, la legisladora del FpV, Juliana Di Tullio, cuestionó la decisión y la calificó como «una pésima noticia para el pueblo argentino».

«No me parece bueno para quienes representamos al 49 por ciento que no votó a este gobierno. La gente nos pide que los representemos. Es una pésima noticia para el pueblo argentino», sostuvo Di Tullio.

«Seguimos siendo la primera minoría», sostuvo la diputada nacional quien además destacó que el bloque del Frente para la Victoria «siempre estuvo abierto» y «jamás se echó a nadie».

A su vez, su par Julio De Vido manifestó: «Es un grave error lo que han hecho estos compañeros. Los hace funcionales la macrismo oficialista gobernante».

«No tengo dudas de que el Gobierno es un actor fundamental en la creación de este nuevo bloque. Ninguno de ellos vino al bloque a dar la cara y explicar su posición», agregó.

En tanto, el ex candidato a presidente, Daniel Scioli, fiel a sus convicciones habló más moderadamente: «Si estamos todos acá no es para que se quiebre el partido».