Pichetto avaló los despidos de Michetti en el Senado

La decisión de Gabriela Michetti de anular los 2.035 nombramientos en planta permanente realizados en el último año por Amado Boudou en el Senado sumó ayer un estratégico aval. Miguel Ángel Pichetto, titular del bloque del Frente para la Victoria, la bancada mayoritaria en la Cámara alta, calificó como “positivo” que la vicepresidenta “quiera hacer más viable al Senado en lo financiero”. Y agregó: “Me parece bueno que se haya creado una comisión que se encargará de revisar quién trabaja y dónde lo hace. Los que trabajan pueden quedarse tranquilos porque los vamos a defender. Si hay gente que no trabaja tendrá que irse”.

En un decreto que se conoció el lunes, pero tenía fecha del pasado 30 de diciembre, Michetti dispuso dar de baja 2.035 pases de personal político a planta permanente y recategorizaciones de personal hechas por Boudou a través de tres resoluciones del año pasado. La vicepresidenta también anuló 2.317 recategorizaciones firmadas por su antecesor durante 10 meses de 2015.
Según información oficial, en 2011 cuando Julio Cobos dejó la vicepresidencia en la planta permanente del Senado había 1.994 empleados. En diciembre pasado, cuando se fue Boudou, el personal de planta permanente sumaba 4790. En otras palabras: en apenas cuatro años se incrementó el personal en un 140%. En ese período no varió la cantidad de senadores –siguen siendo 72– ni se le agregaron funciones o dependencias a la Cámara alta.

Consultado ayer por Clarín sobre si consideraba que el incremento en la cantidad de personal en los últimos cuatro años le parecía excesivo, Pichetto contestó: “Si analizamos de donde se arranca es efectivamente así. Son decisiones que tomaron las anteriores autoridades y a las que en este momento no quiero descalificar. Me parece importante que los bloques y los gremios tendrán una representación en la comisión revisora que se encargará de revisar quiénes trabajan y quiénes no”.

El decreto que da de baja los 2.035 nombramientos también crea una comisión revisora especial que estará integrada por el ex senador Mario Daniele (PJ): el director general de Recursos Humanos de la Cámara Alta, Pablo Casals, y el subdirector general de Administración, Diego Lacu. Esta comisión analizará, en un plazo máximo de 120 días, “la totalidad de los legajos de la planta permanente y las recategorizaciones de los últimos 12 meses a la luz de las necesidades funcionales del Senado”. Se invitó a los tres gremios que nuclean al personal legislativo (APL, UPCN y ATE) a participar como veedores del trabajo de la comisión.

Los gremios se proponen resistir el decreto. “Los trabajadores dados de baja por Michetti no tuvieron chance alguna de defenderse”, se quejó Norberto Di Próspero, titular de APL, el gremio que representa a la mayoría de los empleados parlamentarios (ver página 15).

Pichetto aclaró ayer a Clarín que Michetti no lo había consultado previamente sobre la decisión de anular las designaciones.

En el sector más kirchnerista del FPV se mostraron disconformes con la resolución de la vicepresidenta. “Algunos pensamos que se nos debería haber consultado. Están haciendo cargo de todo a una gestión y acá fuimos todos responsables, nosotros y todo el resto de los bloques. En vez de iniciar una caza de brujas contra los trabajadores deberían haber realizado una auditoria”, se enojó una senadora cristinista.