Otra relación. ADN

Alberto Weretilneck siente que algo tuvo que ver con el porcentaje de votos que sumó Daniel Scioli en Río Negro, en principio uno los más altos del país. El radicalismo poco sumo al triunfo de Mauricio Macri, a pesar de integrar la alianza Cambiemos y reclamar espacios en el próximo gobierno.

No hubo festejos. En Viedma anoche el Comité Central de la UCR, de la calle Alem, estaba cerrado, igual que el Comité Viedma, de Schieroni, mientras que un grupo no mayor a 30 simpatizantes festejaba en el local de Cambiemos en Alvaro Barros, entre Tucumán y Alem. Eran las 21.30 de la víspera.

Por su parte Sergio Wisky convocó para esta mañana, a las 11, a una conferencia de prensa, para analizar el resultado electoral. Sabe que es poco lo que puede mostrar en Buenos Aires de la performance de Cambiemos en Río Negro, donde el 25 de octubre salió tercero y fue superado incluso por el voto en blanco.

El gobernador espera ahora reforzar su anclaje provincial. Al votar en Cipolletti, fue claro al señalar que desearía que el próximo presidente “respete a los rionegrinos sin generar acciones en contra de sus intereses; que encuentre soluciones para la fruticultura y el turismo, que nos respete como productores de gas y de petróleo y de energía hidroeléctrica y que no genere inconvenientes con la situaciones económicas financieras de la Provincia”.

Weretilneck rememoró épocas pasadas y las consecuencias de políticas de ajuste y apertura económica. Estos dichos no fueron obstáculo para destacar la su intención de colaborar, “pero con la seguridad de que no nos vamos a dejar someter ni pisotear, ni vamos a permitir que ningún recurso de la Provincia sea avasallado por parte del nuevo Gobierno Nacional.

¿Desde dónde se para el mandatario para mostrar firmeza?, desde Juntos Somos Río Negro y para esto tiene pensado, junto a sus colaboradores, mostrar un gesto de consolidación en un encuentro que se prevé para el cinco de diciembre en alguna localidad del Alto Valle.

Reiterar que todos pueden sumarse a la “ancha avenida” de JSRN y transitar el próximo camino con “auto propio” como definió una fuente.

Hay lugar para todos, más que un partido, un movimiento donde confluyen hombres y mujeres de distintos partidos, de organizaciones sociales, fuerzas del trabajo, empresarios, etc. Se estima que habría nuevos arribos desde el peronismo, mientras que desde el radicalismo muchos piden tener un espacio formal, como el caso de la legisladora Marta Milesi, entre otros, pero la UCR orgánica tiene porotos en cada olla, por un lado su relación con el gobernador Weretilneck y por otro subirse al carro ganador de Macri, dos relaciones que pueden confrontar a futuro.

Para el cinco de diciembre se convocará a un amplio debate a fortalecer el espacio de Juntos Somos Río Negro y ahora más que nunca, con la bandera del federalismo y de defensa de los intereses rionegrinos frente a eventuales políticas nacionales adversas a la Provincia.

Alberto Weretilneck pretende consolidar una fuerza provincial amplia, frente a una oposición alicaída y que le costará recuperarse, y a la vez convertirse en un referente regional en la Patagonia.