Formalizan audiencia judicial por posible contaminación cloacal en Roca

Roca (ADN).- La jueza roquense Andrea V. de la Iglesia fijó audiencia para el lunes 16 con la presencia de representantes de la Municipalidad de General Roca, de la empresa Aguas Rionegrinas y del Consorcio de Riego -en este caso como colaborador- como parte del amparo colectivo que formuló la comuna y que involucra a la firma estatal provincial.

Además, la magistrada intimó a Aguas Rionegrina para que dentro del plazo de dos días proceda a tramitar el certificado de impacto ambiental y relativo a las tareas que desarrolla en los sectores donde se encuentran las descargas de líquidos cloacales en varios lugares de la ciudad, bajo apercibimiento de aplicar una multa de $ 1.000 por cada día de retardo y a favor de la Municipalidad local.

La resolución judicial fue oficialmente difundida ayer, mediante la cual se comunicó a las partes que podrán concurrir munidos de la documentación que consideren pertinente (planos, informes y que refleje el cuadro de situación) y con los asesores técnicos o especialistas que consideren idóneos a los fines de ilustrar a la jueza y permitir la evaluación y ponderación de las circunstancias que hacen a este conflicto.

Desde la Justicia se busca que los elementos que se presentarán “redunden en definitiva en la optimización de este proceso, en el logro de un compromiso en concreto y que apunten en beneficio de los litigantes y, en definitiva, del bien jurídico que se procura proteger todo ello a través de la concentración de actos, diligencias, medidas idóneas y eficaces, planes de acción”.

Se pretende conocer las tareas que desarrolla Aguas Rionegrinas en los sectores donde se encuentran las descargas de líquidos cloacales en las calles Bolivia y Mendoza, en la zona del desagüe pluvial C21 -paralelo a la ruta nacional, desde calle Mendoza a calle Jujuy, y en el sifón aledaño al desagüe P5, cercano a calle Jujuy y Perú.

Por esta cuestión, el intendente Martín Soria promovió acción de amparo colectivo en los términos de la Ley B 2779, a fin de lograr por esa vía “el cese de la grave contaminación ambiental y el perjuicio a la salubridad pública de los vecinos de esta ciudad y que sostiene es producto de la descarga constante de líquidos cloacales en los desagües pluviales C21 y PV -el primero ubicado de forma paralela a la Ruta Nacional 22 entre calles Buenos Aires y Jujuy, y el segundo en cercanías a la intersección de las calles Jujuy y Perú, como así en las calles Bolivia y Mendoza. Además, solicita que se ordene la inmediata recomposición del daño ambiental provocado”.

Explicó que la contaminación que denunció comenzó a principios de este año y a raíz de la caída del colector cloacal máximo que corre paralelo a la ruta 22 -C21 y a la rotura de un sifón que la empresa ARSA posee a 50 metros de las calles Perú y Jujuy, produciendo “descargas continuas de líquidos cloacales sin tratamiento previo adecuado y generando serios perjuicios a los vecinos y comerciantes que rodean a dichos sectores, colocando a su vez en grave riesgo la salud pública como la higiene y salubridad del río Negro por cuanto los desagües transportan los líquidos hasta dicho cauce de agua”.