Declaración sobre “fondos buitre” ● UNRN

Ante el acoso que hoy sufre la República Argentina existe un amplio consenso -alcanzado, por un lado por los países de la región y del resto del mundo y, por otro lado por organizaciones sociales y académicas, del Norte y del Sur -,que expresa una generalizada preocupación, e incluso rechazo, a la decisión de un juez de los EE.UU. que hizo lugar a la demanda de los «fondos buitre»,

y que afecta los intereses y la soberanía de la República Argentina. Un claro ejemplo de la preocupación internacional han sido las declaraciones de la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL, Dra. Alicia Bárcena, como el incondicional apoyo de la OEA y la del Grupo de los 77+China.

El hecho refleja tanto la ilegitimidad de las medidas judiciales, como la falta de sustentabilidad y previsibilidad que representa la actual arquitectura financiera internacional que no debería permitir fortalecer el poder y la impunidad de los especuladores.

Es sabido que la Argentina ha cancelado intereses y capital por varias veces el valor de una deuda externa generada originariamente bajo la absoluta ilegitimidad de una dictadura militar sangrienta. Deuda externa, de allí en más, impagable al tiempo que, en un mundo como el actual, se hizo imprescindible estar dentro de las reglas del sistema financiero internacional para no sacrificar a las mayorías y en particular a los más débiles. Si bien desde entonces, la Argentina ha decidido acceder al financiamiento externo -y ha pagado por ello tasas de riesgo país, por momentos, muy elevadas-, ello ha sido precisamente consecuencia de la fluctuación económica propia de toda economía moderna. Pero esa tasa de premio (o riesgo país) se paga precisamente porque la toma de deuda es un contrato entre partes, lo que hace a todas luces inequitativo que los “fondos buitre” pretendan tener prioridad sobre el 93% de los acreedores que, bajo la comprensión de las reglas del sistema financiero, aceptaron reestructurar la deuda argentina precisamente porque les ha resultado totalmente comprensible la oferta de la Argentina. En vez de ello, estos “fondos buitre”, bajo el uso de una racionalidad perversa, quieren recuperar el 100 % del valor nominal de los bonos de deuda argentina en su poder habiéndolos comprado por su precio de mercado, en menos del veinte por ciento de su valor, con fines especulativos. El propio argumento del Juez respecto a la calificación de la República Argentina como deudor recalcitrante hace a una falta de objetividad que recuerda a oscuras épocas de discriminación que, a lo largo de la historia humana, causaron millones de víctimas.

Estas decisiones tomadas por la Justicia de los Estados Unidos -aún en contra de la opinión de muchos líderes de esa nación y dando legitimidad plena a quienes compran a precio vil bonos de deuda en default para pretender luego recuperar el valor nominal más los intereses caídos y los eventuales punitorios-, mandan así un mensaje de amenaza a la soberanía argentina y también a la de todos los países dispuestos a cumplir con sus compromisos financieros en condiciones de equidad y justicia, afectando además los esfuerzos internacionales actuales y futuros de distintos países para reestructurar sus deudas soberanas.

Por otro lado, es cuestionable la extraterritorialidad de la jurisdicción estadounidense reflejado en un fallo judicial que puede prohibir a la Argentina pagar dentro del territorio nacional o aún en Europa.
Admitir esto implicaría aceptar que es legítimo erosionar los recursos necesarios para alcanzar las metas de desarrollo alejándose de todo el espectro del ideario de un mundo más justo. Ideario expresado de diversas formas por los organismos internacionales, sea a través de metas de reducción de la pobreza o a través de la fijación de estándares de acceso universal a bienes y servicios.

Esta situación pone de manifiesto las inconsistencias e inequidades del sistema internacional y el poder desmesurado del mundo financiero sobre el del trabajo y la producción.

El riesgo de la ausencia de un mecanismo de negociación y resolución que facilite los pagos y permita un manejo adecuado de la deuda, redunda en la misma inestabilidad del sistema financiero internacional, pues sienta un precedente que puede obstaculizar futuros procesos de reestructuración de deuda.
El vacío legal que se pone de manifiesto, con la Argentina como caso testigo, debería dar lugar a una reforma en la normativa internacional que permita proteger el bien común del afán de ganancias extraordinarias de las minorías.

Por lo anterior, la comunidad educativa de la Universidad Nacional de Río Negro apoya la posición del Gobierno Nacional que, en un acto de firmeza, ha decidido cumplir su compromiso con los acreedores que ingresaron a los planes de reestructuración de deuda externa y en un mismo sentido ha rechazado las demandas especulativas de los “fondos buitre”, al tiempo que ha reiterado la predisposición frente a los mismos para que reciban un trato similar al dispensado a la mayoría de los acreedores.

A su vez, esta Comunidad expresa una enorme preocupación por este precedente jurídico sentado por un juez de los Estados Unidos de América, que ante la negativa de la Corte Suprema de Justicia de ese país de tomar el caso, lo erige en instancia suprema de facto. Es de destacar que ello constituye una grave amenaza para la democracia y para las condiciones de gobernabilidad de nuestro país y para todo otro que bajo un señalamiento específico pueda ser víctima de actos humillantes al amparo de una interpretación formal de la democracia cada vez más alejada del fresco espíritu al que le dio lugar.

Firman: Juan Carlos Del Bello (Rector), Pablo Bohoslavsky (Vicerrector), Roberto Kozulj (Vicerrector), Anselmo Torres (Vicerrector), Norma Hintze (Secretaria de Administración y Gestión Estratégica), Marta Borda (Secretaria de Investigación, Transferencia y Desarrollo Tecnológico), Alejandro Aragón (Secretario de Docencia, Extensión y Vida Estudiantil), Carlos Rezzano, (Secretario Gestión Académica Sede Andina), Laura Totonelli (Secretaria de Gestión Administrativa S. Andina).

Consejeros: Luis Giannini (Sec.Gral CTA Rio Negro, consejero externo de la UNRN por las.org. sindicales), Daniel Jurgeit (Presidente Federación de Entidades Empresarias de la Provincia de Rio Negro), Guillermo Celso Oglietti, María Elena Ruiz, Ricardo Quintana

Docentes: Daniel Barrio, Eduardo Pantano, Francisca Laos, Hernán Gustavo Andrade, Eduardo Lozano, Rodrigo Sánchez, Mabel Marcantoni, Diego Aguiar, Enrique Birochio, Dora Riestra, Rodolfo Coria, Alberto Caselli, Paola Britos, Patricia Satti, Carlos Fabián Lugani, Javier Serrano, Víctor Hugo García, Inés Fernández Mouján, Eduardo Casali, Martín Mariano, Julio Goin, Bibiana Misischia, Paula Gabriela Suárez, Francisco Raul Murcia, Victoria Zanon, Nicolás Fellenz, Fabio Miguel, Gabriela F. Lerzo, Jorge Shitu, Pablo Macchi, Francisco Oga, Alicia Nudler, Gustavo Federico Apablaza, Evelio Bello Varela, Perla Brevi, Pablo Carranza, Noelia Beatriz Carmona, Gema Fioriti, Gustavo Glombovsky, Daniel Alfredo Martínez, Stella Maris Tapia, Graciela Simonit, Jorge Andrés Vera, Ailén Spera, Carlos Daniel Avila, Andrea Bautista, María Esperanza Casullo, Mónica Viviana Ricca, Fernando Martínez Cuerda, Martin Morixe, Maria Ester Gazoni, Daniel Lacolla, Javier Antonio Salinas, Neri Daiana, Natalia Barrio, Juan Carlos Suizan, Carola Dreidemie, Mauro Edel Sánchez, Victor Gallardo, María Andrea Tapia, Lila Luchessi, Paula Páez, Juan José Ponce, Carolina García Sartor, Norberto Lipchak, Liliana Lolich, María Elena Ruiz, Cecilia Fourés, Michelle Aslanides, Matías Martinez, Carlos Grassi, Adriana Serquis, Nicolás Garcia Martinez, Pablo Fuentes, Alejandro Arca, Lucas Gabriel Alejandro Urra Pasgall, Mila Cañón, Maria Carolina García, Pablo Pierantoni, Susana Graciela Fantini, Diana Delucchi, Mario Villegas, Lucía Isabel Tamagni, Gustavo Naón, Patricio Solimano, Flavia Montello,
No docentes: Ariel Gomis, Pablo Domecq, Jorge Vallaza, Marcos Del Bello, Martin Vesprini, Anibal García, Javier Peric, Leonardo Martins, Victor Hugo Pini, Marcelo Thorp, Gabriel García, Alberto Zottele, Ana Laura Alvarez Cavallotto, Flavia Cristiani, Leticia Gallo, Paulina Andrés, Anahí Marisol Cardigonde, Marcelo Moro, Ana Cecilia Rizzo, Patricia Giordana, José Luis Tappatá, Mónica Gavetti, Juan Manuel Chironi,, Juan Ignacio Ortiz, María Josefa Fleming, Silvina Paz, Silvia Graciela Mattei, Nicolás Periolo, Mauro Armas, Ignacio Artola, Jorge Luis Prestofelipo, Román Camba, Roberto Samar, Ricardo Espinosa, Candela Galantini Grandoso, Federico Santos, Lucia Oliveira, Enrique Camino, Elizabeth Ventura Aguilar, Mirta Rodriguez, Alejandra , Héctor Luciano Alvarez Soria, Gabriela Perren, Silvina Paz, Mariana Nelson, Paula Casas, Laura Spatocco, Griselda Liliana Devesa, Emiliano Mutchinick, María Daniela Mendoza, Samuel Olivera.