Muy buena concurrencia a la Primera Fiesta de los Frutos Secos

Viedma.- Con una muy buena concurrencia y la posibilidad de degustar decenas de exquisiteces, se desarrolló la Primera Fiesta de los Frutos Secos en Viedma.

Los organizadores se mostraron satisfechos y con el principal objetivo cumplido: que se comience a conocer las posibilidades de la producción de frutos secos y sus derivados. El cierre estuvo a cargo de la Escuela de Gastronomía y la Fundación Cocina Patagónica, que prepararon diversas comidas, todas a base de frutos secos aportados por los propios productores.

Budines, cremas, panes, tortas, aceites, fueron algunas de las delicias que probaron los asistentes a Sal y Fuego.

Antes representantes de la Cámara de Productores de Frutos Secos, el Municipio de Viedma y la Estación Experimental del INTA. El Municipio, a través de Pedro Sánchez, felicitó a los productores que tuvieron la idea inicial en 2007 y que se concretó este fin de semana. Además, se comprometió a acompañar el proceso de reconocimiento en el Ministerio de Producción.

También la presentación del cluster de frutos secos, y luegoel Manual de Avellanas, realizado por los ingenieros Darío Martín y Juan Rolka.

Luego las dos universidades nacionales de la ciudad hicieron presentaciones. Daniel Barrio, de la UNRN, mostró el proyecto de aceites de frutos secos y Eduardo Luis, del CURZA, la especialización en frutos secos.

Nuestro valle tiene sembrada más de 900 hectáreas de nueces y avellanas. En este rubro, es el principal productor del país.

Una enorme parte de la producción se destina para la empresa Ferrero Rocher para la realización de sus reconocidos bocaditos.

El objetivo de esta primera edición es que la comunidad conozca el potencial productivo, para luego continuar fortaleciendo su liderazgo comercial en el país.

La actividad es organizada por la Cámara de Productores de Frutos Secos de la zona, el INTA y el Municipio.

Viedma es unas de las regiones con mayor producción de avellanas, contando en estos momentos con 450 hectáreas con avellanos y 450 más con nogales.

Más de 30 productores se dedican a la actividad, que se ha adaptado perfectamente a nuestro clima. El nivel de la producción local ha llevado a la exportación de plantines a otros países, como el vecino estado de Chile.