Estatales nacionales superarán los $67.000 de salario

(ADN).- La paritaria de los estatales nacionales cerró en un 40% hasta enero del 2022, pero en los escalafones iniciales ese aumento se estirará hasta el 54% por lo que el Secretario Adjunto de ATE Nacional, Rodolfo Aguiar, aseguró que “desde que asumió el gobierno de Alberto Fernández, recién ahora se advierte un incipiente crecimiento de los salarios en el sector público”.

“El acuerdo paritario al que arribamos nos coloca en un camino de recuperación real de los ingresos. Esto es un alivio, ya que se trata de la primera señal de reparación real del deteriorado poder adquisitivo de todos los estatales», consideró el dirigente nacional.

El aumento salarial alcanzará a 125 mil estatales de la Administración Pública Nacional bajo el Convenio Colectivo General de Trabajo del Decreto 214/06. De esta forma, el aumento del 35% acordado en mayo de este año pasa a ser del 40%. En tanto, se fijó una nueva fecha de revisión del acuerdo para enero de 2022.

«Finalmente, en la negociación se pudo contemplar el criterio de equidad y esto permitió que el impacto en los ingresos menores sea mucho mayor, llegando al 54% para el nivel inicial. Esta paritaria permitirá por primera vez en los que en la administración pública nacional para el mes de octubre ya no existan salarios por debajo de la línea de pobreza», explicó el dirigente nacional. De esta manera, los salarios de los estatales permitirán superar los $67.577 necesarios para que una familia tipo supere la línea de la pobreza, según el Indec.

El 54% de aumento es alcanzado a partir de los convenios sectoriales, los cuales obtuvieron importantes mejoras salariales: 65.000 trabajadores del Sistema Nacional de Empleo Público (SINEP) acordaron una suba de hasta el 54% y 6.000 trabajadores de la salud alcanzados por el decreto 1133/09 tendrán un incremento del 54% para el personal asistente de grado 0 y 53,8% para el de grado 6.

Aguiar destacó «la cláusula que estipula una nueva revisión en enero y que funcionará como garantía de resguardo ante cualquier desajuste inflacionario posterior” pero espera que “esta voluntad política de jerarquizar y valorizar el trabajo estatal se sostenga en el tiempo y no sólo responda a una necesidad de la época electoral».

La revisión original de la paritaria estaba prevista para noviembre, pero el reclamo del sindicato y el aumento de la inflación por sobre la proyección oficial obligó a adelantar la reunión a agosto. Mientras el Gobierno previó una inflación del 29% para este año, en los primeros siete meses se registró un aumento del 29,1%, dejando al pronóstico obsoleto.