Pandemia y crisis global… ¿receta global?

(CEPA*).- Voluminosos paquetes fiscales, garantías de créditos y reducciones de tasas parecen ser los tres ingredientes de la receta global para hacer frente a la crisis que se avecina y que descansa en la inyección de recursos estatales en distintas partes del planeta. Argentina, Brasil, México, Estados Unidos, Italia, Francia, Alemania, España, Reino Unido, China, Corea del Sur y Japón: así se compone el panel de países analizados en este informe, con el objetivo de cubrir políticas económicas de distinta índole aplicadas en América, Europa y Asia. 

Pareciera haberse expandido, en este virus global, también una receta global: los estados ponen recursos para compensar los efectos de la crisis. Ahora bien: ¿con qué espalda económica cuenta cada uno para afrontar esta situación? A priori, esta crisis global llega cuando la economía ya presentaba diversos síntomas de estancamiento. Incluso en este contexto, la situación de cada región del planeta es diferente.

El caso argentino presenta una serie de indicadores muy negativos, que combinan una de las tasas de desocupación más elevadas de América Latina –y del mundo-, con 10,9% (dato publicado por Banco Mundial, a 2019), con una caída de su producto en 2,2% en 2019 (único de todo el panel de países que tuvo caída el año pasado), deuda sobre PBI de 93% y déficit fiscal de 0,6%.

Otros países con elevada desocupación son Brasil (11,9%), España (11,9%) e Italia (9,8%), aunque en los tres casos, 2019 fue un año de crecimiento económico: 1,1%, 1,8% y 0,1%, respectivamente. Los niveles de deuda de Estados Unidos y de países europeos son también equivalentes al producto, como en Argentina, con una sola diferencia crucial respecto de nuestro país: están endeudados en su misma moneda, mientras que Argentina debe repagar en moneda extranjera en un 80%.

Por lo pronto, la editorial del periódico británico Financial Times del 3 de abril dio que hablar en estos últimos días: «Tendrán que ponerse sobre la mesa reformas radicales —la reversión de la dirección política prevaleciente de las últimas cuatro décadas—. Los gobiernos tendrán que aceptar un papel más activo en la economía. Deberán concebir a los servicios públicos como inversiones en lugar de pasivos, y buscar formas de hacer que los mercados laborales sean menos inseguros. La redistribución volverá a estar en el orden del día», para agregar «las políticas hasta hace poco consideradas excéntricas, como los impuestos sobre la renta básica y los impuestos sobre la riqueza, tendrán que estar en la mezcla».  

¿Refleja esta editorial de un prestigioso diario financiero británico un debate más profundo por parte de la dirigencia política y los poderes económicos del mundo? ¿Qué profundidad puede tener la revisión de la política económica global? Seguramente, este tipo de discusiones seguirá creciendo, buscando encontrar un nuevo consenso sobre cómo se financian y cómo gastan las economías del mundo.

Por ahora, pareciera que la austeridad fiscal está herida de muerte, pero ¿será la receta para salir de la crisis post-pandemia que muchos pedirán? ¿Cuánto tardará en resurgir de las cenizas?

No hay sentencias definitivas por estas horas, sino que se abre un abanico de interrogantes hacia el futuro.

*Centro de Economía Política Argentina

Informe completo: https://mcusercontent.com/e9c6f62a4dc825f6a9dab4e88/files/e0280c7f-0bc0-413b-9bb3-1f33156a9286/Pandemia_global…Receta_global_final.pdf