Bariloche: denuncian agresiones contra comunidad Mapuche

(ADN). – “Emilio Friedrich y Víctor Sánchez acompañados de su abogada Laura Zanoni, ex presidenta del Instituto de Tierras municipal de Bariloche,  junto al empleado Alejandro Vera comandaban un grupo de personas que persiguió, golpeó a mujeres, niños, jóvenes y adultos, lastimando con cuchillos e hiriendo a Ramiro Buenuleo», afirmó Deolinda Buenuleo, integrante de la comunidad mapuche Buenuleo, ubicada en la ladera sur del cerro Ventana, junto al río Ñireco, cerca de San Carlos de Bariloche y dentro del Parque Nacional Nahuel Huapi.

Por su parte el Ministerio Público Fiscal de Bariloche informó sobre la detención de cuatro hombres a los que se le formularán cargos en audiencia que será fijada por la Oficina Judicial.

El equipo de fiscales Tomás Soto y el fiscal adjunto Gerardo Miranda se hicieron presente en el interior de un lote en el predio conocido como «Pampa de Buenuleo», luego de ser notificados por la Comisaría 42, de la comisión de diversos delitos, donde se pudo constatar que resultaron tres víctimas, un hombre y dos mujeres. El Ministerio Público Fiscal inspeccionó el lugar y se dispusieron medidas de prueba.

Se entrevistaron con las personas que resultaron víctimas a quienes les tomaron declaraciones testimoniales; a fines de determinar las circunstancias en las que sucedieron los hechos. Se suma a ello la intervención del médico de la Policía de Río Negro, para determinar el carácter de las heridas recibidas.

A su vez Greenpeace repudió las agresiones de grupos armados hacia la comunidad mapuche Buenuleo, y el intento de desalojo por parte de empresarios que pretenden realizar un desarrollo inmobiliario en el lugar. Los atacantes fueron identificados y denunciados ante la Justicia por la comunidad.

El 10 de septiembre de 2019 se inició un proceso de recuperación territorial por parte de esta comunidad, del lugar que la familia habitó ancestralmente y donde tienen actividades ganaderas desde hace años, fuera comprado de manera fraudulenta, según se denunció, por el empresario Emilio Friedrich con el objetivo de realizar un desarrollo inmobiliario de 90 hectáreas aproximadamente.

Greenpeace pudo comprobar, mediante la comparación de imágenes satelitales, que entre  2014 y 2019, los años de ocupación de los empresarios de esas tierras, se realizó el desmonte ilegal de casi una hectárea de bosque de lengas.

“La mayoría de las comunidades indígenas no han obtenido la titularización de sus tierras y en las últimas décadas, con el avance de la frontera agropecuaria y de los negocios inmobiliarios aumentaron la destrucción de los bosques y las agresiones de empresarios hacia sus históricos habitantes», señaló Hernán Giardini, coordinador de la campaña de Bosques de Greenpeace.

Greenpeace apoya el acuerdo justo y equitativo de derechos indígenas pendientes y cuestiones relacionadas con los títulos como fundamentales para desarrollar sociedades sustentables y hace referencia a la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos Humanos de los Pueblos Indígenas, incluso el derecho específico de autodeterminación, libertad, paz y seguridad, como individuos y colectivamente como pueblos distintos, y al consentimiento libre, previo e informado para las decisiones que los afectarán, incluso cualquier proyecto en sus territorios tradicionales.