Rechazo empresario al aumento tarifario del agua

(ADN). – La Federación de Entidades Empresarias de Río Negro (FEERN) expresó su rechazo a un posible aumento tarifario del servicio de agua potable y cloacas antes de fin de año por parte de Aguas Rionegrinas Sociedad Anónima (ARSA), que «generó inmediatamente preocupación en el sector PyME de nuestra provincia que no deja de ser blanco de medidas que no hacen más que golpearlo y ponerlo en riesgo de extinción», señaló la entidad.

La información surge a partir de la presentación de ARSA al Departamento Provincial de Aguas, la revisión tarifaria y lograr un incremento de la facturación que rondaría el 47%.

La Federación de Entidades Empresarias de Río Negro (FEERN) advirtió que un aumento semejante en la tarifa del servicio no hace más que poner en peligro la subsistencia de miles de PyMEs en medio de un escenario de crisis económica, debido a la situación asfixiante por la que atraviesa el sector comercial, la estrepitosa caída en las ventas, el notable aumento de costos y la presión impositiva, entre otros factores.


«Queremos dejar sentada la posición de que un aumento de estas características resulta irrisorio, teniendo en cuenta que el incremento desmedido autorizado por el DPA el año pasado fue del 95,70%. Parecería ser que las pequeñas y medianas empresas son las encargadas de absorber todas medidas y los aumentos, cuando en realidad, la supervivencia de éstas depende de las prevenciones que se tomen en el plano tributario, financiero, energético, laboral y de consumo interno, como lo explicaron días atrás los directivos de CAME durante la Asamblea General Ordinaria», expresó la FEERN.


También el sector empresarial alertó que los reajustes de trifas serán resueltos por el ente regulador en un plazo de 30 días corridos, de acuerdo a los términos de la convocatoria que administran los técnicos del DPA y explicó que «ahora, los procesos de revisión tarifaria son más ágiles ya que el año pasado la Legislatura aprobó una norma que permite aumentos automáticos sin necesidad de llamar a Audiencia Pública para discutir las subas. Si bien la gente podía opinar en esas asambleas, casi todas fueron un virtual fracaso ya que contaban con poca asistencia de parte de los usuarios.