¿Habrá dedo nacional en la designación de candidatos?

(ADN).- Culminado el proceso de inscripción de las alianzas para las próximas elecciones nacionales, ahora se abre el espacio para discutir candidaturas al Congreso. Tanto en el sector de Fernández-Fernández como en el de Macri-Pichetto, hay coincidencias que los nombres vendrán «enlatados» de Buenos Aires y surgirán de acuerdos internos. ¿Serán la Casa Rosada y el Instituto Patria los grandes electores?

Donde más se movió el avispero fue en Cambiemos -que ahora se llamará Juntos por el Cambio- porque a la disputa de espacios entre la UCR, el PRO y la CC-ARI se suma el poder de definición que reclamará seguramente el candidato a vicepresidente, Miguel Pichetto y de ser así, en Río Negro «pasarán cosas».

En la provincia está instalado que el candidato a primer diputado nacional lo pone el PRO, con destino a Sergio Wisky, mientras que el criterio instalado desde Buenos Aires es que los candidatos a senadores quedan en manos exclusiva del presidente Mauricio Macri, decisiones que podrían estar compartidas con su compañero de fórmula.

En el radicalismo rionegrino descartan sin embargo que el candidato a la Cámara Alta del Congreso Nacional, será radical y dejan el espacio de diputados al PRO, pero hay otro socio y precisamente el diario La Nación, publicó hoy que Carrió y la Coalición Cívica ya acordaron con el Gobierno que lugar tendrán los suyos en las listas de este año.

Según esta información la Casa Rosada le garantizó a los «lilitos» que su bloque podrá renovar dos de las diez bancas que pone en juego. Y que a esos lugares se sumarán en las listas entre cuatro y cinco candidatos a diputados más, según aseguran cerca de la diputada, con chances de entrar al Congreso.

Entonces en Río Negro habría que sumar a las conversaciones a posibles candidatos de la CC-ARI, Bautista Mendioroz, Javier Acevedo y a Daniela Agostino.

De esta manera las negociaciones locales por los espacios en las listas de candidatos tendrán aún un tiempo de espera con no poco nerviosismo y especulaciones, como por ejemplo la que indica que si Pichetto es consultado por los candidatos de Río Negro no aportaría el nombre de ninguno de sus adláteres históricos, sino que buscaría un perfil fuera de la política tradicional y del ámbito empresarial frutícola del Alto Valle, acorde con el modelo de época.