Género: Un fallo de Servini impacta en el PJ y el Congreso

(ADN).- La jueza federal María Romilda Servini emitió un fallo clave para cumplir con la paridad de género en el Congreso de la Nación: cuando se produce la vacante de una mujer en la Cámara Baja, ese lugar debe ser ocupado por otra mujer. La decisión impacta particularmente en Río Negro porque define la sucesión de María Emilia Soria, si es elegida intendenta de Roca.

La actual diputada del Frente para la Victoria asumió el 10 de diciembre pasado, pero ahora compite por el gobierno de su ciudad. Según los sondeos, Soria es favorita para la elección del 23 de junio. Si triunfa, debe dejar la su escaño en el Congreso.

Esa posibilidad abrió en el FPV un debate. Pero la justicia federal acaba de cerrarlo.

Cuando se anunció la postulación de Soria, la primera reacción en el espacio fue: «el que sigue en la lista». Es el concejal de Bariloche, Ramón Chiocconi. Incluso, aseguraban en el partido, el médico no asumiría su banca de legislador provincial (que obtuvo en la elección del 7 de abril) para emigrar al Congreso.

Sin embargo, había voces en el PJ que advertían sobre la ley de paridad de género, y eso beneficiaba a la concejal de San Antonio Oeste, Ayelén Spósito, que sigue a Chiocconi en la lista.

El problema de esa posibilidad es que, hasta ayer, no había antecedentes sobre la aplicación de ley y las sucesiones se definían por el sistema tradicional.

Pero Servini, quien tiene competencia electoral, dio lugar al amparo presentado por las dirigentes del Frente Renovador, Malena Galmarini, Marcela Durrieu y Lorena Ferrano Medina que tenía como objetivo principal impedir que la Cámara de Diputados le tomara juramento al suplente oficialista, Jorge Garayalde. De esta manera, quien ocupará la vacante en la banca de Cambiemos será Alejandra Caballero.

Anabella Hers Cabral, quien dejó su lugar a Caballero, celebró la decisión de Servini a la que consideró un fallo histórico y, a través de Twitter, expresó: «Brindo por mis queridas mujeres… Salud».

«Entre dos soluciones posibles, debe procurarse aquella que garantice el adecuado equilibrio entre mujeres y hombres en la composición del cuerpo legislativo. Disponer lo contrario implicaría en los hechos una disminución en el porcentaje de la representación de las mujeres en el Parlamento», argumentó la jueza.

Servini entendió que, una decisión en contrario, implicaría «vulnerar el accionar progresivo de la legislación, cuya finalidad no fue otra que dar cumplimiento al mandato constitucional en pos de la igualdad real de oportunidades para el acceso a cargos electivos, removiendo de esa forma los obstáculos que permitan una mayor participación de la mujer en los ámbitos de las decisiones políticas».