Cristina candidata y Macri «no es indispensable»

La incertidumbre política provocó un miércoles negro en el mercado. El riesgo país saltó 95 puntos y llegó a 963, el máximo en la era Macri. El dólar rozó los $45 y se desplomaron las acciones.

Un día después de que Cristina Kirchner diera indicios serios de que será candidata a presidenta y de que buena parte del establishment acelerara las presiones para que Mauricio Macri desista de ir por la reelección, el mercado volvió a mostrar su desconfianza sobre el país y castigó duramente los activos argentinos, publicó LPO

Fue un nuevo día negro en el mercado. El riesgo país tuvo un impactante salto de 95 puntos básicos (10,9%) para llegar a 954 puntos, un nuevo récord en la era Macri. Las acciones argentinas se desplomaron y el dólar subió más de un peso, hasta rozar los $45. Eso sumado a la mala renovación de Letes del martes, la peor del año.

Como explicó LPO, a raíz de la gran incertidumbre existente los inversores están tratando de cerrar masivamente sus posiciones en el país y al no encontrar compradores, se dispara el precio de los bonos que ya rinden más de un 17%.

En consecuencia, este fenómeno se refleja tanto en el indicador de JP Morgan como en los seguros contra default (CDS) a cinco años que cruzan los 1.000 puntos básicos por primera vez en la gestión Cambiemos. «La caída del jueves pasado fue la primera señal de que el mercado no estaba respondiendo a la salida de los inversores extranjeros. No hay compradores y hoy vemos la culminación de ese proceso de deterioro», manifestó el analista de mercados Francisco Uriburu.

El mercado empieza a mostrar signos evidentes de que la incertidumbre política está generando una enorme desconfianza en los activos argentinos, mientras el Gobierno apuesta únicamente a señalar a la oposición por las turbulencias financieras.

El propio Macri intentó ensayar esa explicación. «Ahora está todo cruzado por la elección, el mundo duda que por ahí los argentinos quieren volver atrás y eso da mucho miedo al mundo, aumenta el riesgo país, toman posiciones defensivas, pero yo creo que están equivocados, que los argentinos no van a volver atrás», declaró el presidente en una radio de Venado Tuerto.

El problema es que más allá de una nueva subestimación de la situación, las declaraciones reconocen que los inversores ven cada vez más probable una inminente derrota de Macri en octubre. Así lo marcan todas las últimas encuestas, aunque el mandatario le haya dicho a empresarios que cree que ganará el ballotage 52 a 48. Ese vaticinio, con un margen tan finito, también esconde que ni en la Rosada confían en ganar.

Buena parte del establishment empresario dio el martes una muestra más que evidente de que preferirían que Macri se baje de su intento reeleccionista y active el «Plan V», es decir una candidatura presidencial de María Eugenia Vidal. Aunque la gobernadora lo tuvo que desmentir, los hombres de negocios ya se esfuerzan cada vez menos en mostrar que Vidal es su preferida. Una idea que incluso planteó Nicky Caputo, el mejor amigo de Macri.

«Vidal sería una muy buena candidata presidencial», alentó este miércoles el titular de la Cámara de la Construcción, Julio Crivelli. Ayer los elogios a la gobernadora los había hecho el presidente del Cicyp y vice de la UIA, Daniel Funes De Rioja. Antes fue el empresario Martín Cabrales, que aseguró que Macri no es «indispensable».

Todos esos movimientos en Cambiemos se conjugan con la fuerte señal de Cristina Kirchner sobre su candidatura. La senadora despejó casi todas las dudas con el lanzamiento de su libro, el anuncio de un acto de presentación, y los gestos de apertura a Estados Unidos y Héctor Magnetto. Todas novedades que en el mercado causaron alertas.

Un cóctel que empieza a sacar a la luz el reclamo cada vez más fuerte del sector más ortodoxo del mercado. «A esta altura es imperativo que Cambiemos anuncie una nueva fórmula Presidencial, sin Macri», escribió el economista del CEMA Carlos Rodríguez, que alertó sobre «la inminencia de una crisis financiera final».