El gobierno mira a Río Negro y Neuquén. Teme dos derrotas

En la Rosada miran el calendario electoral con preocupación por la posibilidad de perder en las dos primeras provincias que elegirán gobernador, publicó en una nota el sitio digital LaPolíticaOnline y destaca que el Gobierno teme perder las dos primeras elecciones del año. Río Negro y Neuquén son las primeras provincias que eligen gobernador y en Cambiemos creen que puede ganar el kirchnerismo.

Recuerda que Neuquén será la primera provincia en elegir gobernador, el próximo 10 de marzo. Allí el candidato del Gobierno, el radical Horacio «Pechi» Quiroga, corre detrás del gobernador Omar Gutiérrez, del Movimiento Popular Neuquino (MPN) y del candidato de Unidad Ciudadana, Ramón Rioseco.

La Rosada aspira que al menos Gutiérrez, que tiene una aceitada relación con Macri por la explotación de Vaca Muerta, logre derrotar al candidato kirchnerista. El MPN gobierna la provincia desde 1962 y construyó una imagen de imbatibilidad. Pero en el movimiento conviven sectores del peronismo que reniegan del acercamiento extremo de Gutiérrez a Macri, a tal punto de que el vicegobernador Rolando Figueroa lo cuestiona abiertamente.

Esta semana Rioseco señaló que «la sociedad y los medios reconocen la posibilidad real de que el MPN pierda las elecciones por primera vez en 60 años y, al mismo tiempo, reconocen las dificultades que afronta Pechi Quiroga como representante del Presidente Macri», según LPO.

Luego hace referencia a las elecciones en Río Negro, el 7 de abril, y tras señalar que el PRO bajó a Sergio Wisky, refiere a que la candidata será la radical Lorena Matzen, que según los sondeos de Cambiemos no llega a los 15 puntos. El candidato que corre con ventaja es Martín Soria, otra de las apuestas de Cristina Kirchner para un golpe de efecto antes de las primarias de agosto.

Según la publicación, como en Neuquén, la Rosada se conforma con un triunfo del gobernador Alberto Weretilneck y señala que altas fuentes del Gobierno confirmaron a LPO que con Weretilneck hay un acuerdo «de hecho».

La novela por el desdoblamiento del que finalmente desistió María Eugenia Vidal encontraba uno de sus argumentos precisamente en la necesidad de contar con una victoria resonante que frene la racha de derrotas antes de las elecciones en las que Macri buscará la reelección.

La propia Cristina pidió un acuerdo con Mariano Arcioni en Chubut porque sabe que esa provincia tendrá primarias una semana después de las elecciones de Río Negro en las que puede triunfar Soria.

Después de Neuquén y Río Negro será el turno de Córdoba y La Rioja, el domingo 12 de mayo. Córdoba, donde Macri arrasó en 2015, se convirtió en la provincia más problemática para la Rosada por la interna radical. En La Rioja, por su parte, el Gobierno todavía no pudo frustrar la re-re de Sergio Casas. En ambas provincias corre con ventaja el peronismo.