Las operaciones de Nosiglia y un candidato peronista

(ADN). – El inefable operador del radicalismo hace alquimia y busca un candidato presidencial peronista que le permita al gobierno de Cambiemos ampliar su marco de alianzas para recuperar clase media.

Según publicó el portal LPO, Enrique Nosiglia “se sumó a aquellos que creen que Macri debería ampliar hacia el peronismo la alianza gobernante si quiere estabilizar su gestión, transitar con éxito el ajuste que se viene y mantenerse competitivo para el 2019”.

Según se informó, la elucubración electoral del operador histórico del radicalismo, que transitó en las sombras en todos los procesos políticos desde el retorno a la democracia en 1983, tiene como propuesta armar una candidatura presidencial del senador santafesino Omar Perotti, apoyada por sectores radicales y del socialismo, para competir en una eventual primaria presidencial de Cambiemos.

Sobre el tema la LPO indica que la jugada es ofrecerle al radicalismo y los socialistas que tienen su alianza de gobierno en Santa Fe en crisis, la opción de mantener la gobernación, al retirar de la carrera provincial al candidato opositor que hoy surge con más fuerza., pero allegados a Perotti calificaron la jugada como «un disparate», a la vez que el senador santafesino indicó que “es una operación para correrme de la pelea por Santa Fe.

Cuáles son algunos de los argumentos que se esgrimen. Presentar un candidato de Rafaela “típica ciudad de pymes industriales”, en un momento en que el modelo de Macri empieza a profundizar su perfil financiero y de la mano del FMI se encamina a instrumentar un ajuste clásico.

«Si nosotros no armamos un colchón para contener el voto de clase media y estos arman con Lousteau, Margarita y los socialistas, lo perdemos», es la lectura del «Coti», según LPO. Además, le preocupa un dato que recibió esta semana: Su ex protegido Martín Lousteau se reunió con el líder del Frente Renovador. Contacto que se suma a la reunión pública que tuvieron Urtubey con el socialista Lifschitz.

Nosiglia dice que «una interna que compitan Urtubey, Massa y acaso Lousteau o Lifschitz nos complica».
Es que en el entorno del radical tienen claro como hizo Cambiemos para quedarse con el poder. En la primaria Macri sacó 24,5 puntos contra 20,5 de la primaria Massa-De la Sota. Fue gracias a los casi 6 puntos que le sumaron las candidaturas de Sanz y Carrió que llegó a 30 y se puso competitivo para el ballotage contra Scioli. «Tenemos que evitar que ahora sean ellos los que no armen esa coalición», explican cerca de Nosiglia.

Según LPO, en esa línea también se intentó tantear desde el sector más peronista de la Casa Rosada a los gobernadores Bordet y Passalacqua con una eventual candidatura a vicepresidentes de Macri.
Todas estas operaciones no cuentan con el visto bueno del propio Macri, que las rechaza de plano. El presidente hoy es el «halcón» de su propio Gobierno y resiste hasta un mínimo cambio de gabinete.