Taca

Después del altercado mediático entre el intendente y el funcionario provincial, sonó el teléfono rojo. Ambos respondieron positivamente a la mediación propuesta desde Viedma, y se sentaron en el bar de una estación de servicio en Bariloche a limar asperezas.

El «Taca» había acusado a Gennuso de «quedarse con la guita del Catedral», y el jefe comunal contraatacó: «es un personaje nefasto».

Desde la Casa de Gobierno alentaron la reconciliación. Una muestra más de respaldo al polémico funcionario de Desarrollo Social. El intendente bajó los brazos y cedió. En Bariloche lo interpretan como una pérdida de poder y autoridad.