Río Negro conmemoró los 40 años de La Noche de las Corbatas

(ADN).- El Poder Judicial de Río Negro fue sede de un acto de recordación por los 40 años de la “Noche de las Corbatas”, una serie de operativos llevados a cabo entre el 6 y el 8 de julio de 1977, durante la dictadura cívico-militar, que terminó con el secuestro de seis abogados y familiares.

Norberto Centeno, Salvador Manuel Arestín, Raúl Hugo Alaiz, Tomás J. Fresneda y su esposa, María Esther Vázquez de García y su esposo Néstor Enrique García Mantica,fueron asesinados y desaparecidos. Camilo Ricci, Carlos A. Bozzi, José Verde y su esposa Ana María fueron secuestrados y luego liberados.

Todos eran abogados de sindicatos, partidos, agrupaciones presos políticos.

El acto fue organizado por el Poder Judicial, la carrera de Abogacía de la Universidad Nacional de Río Negro y el Colegio de Abogados de Viedma. Es la primera vez que, de manera institucional, se recuerda este suceso producto del terrorismo de Estado.

Estuvieron presentes las juezas del Superior Tribunal de Justicia Adriana Zaratiegui y Liliana Piccinini, el titular de la carrera de Abogacía de la UNRN, Fernando Barrio, la profesora Verónica Piccone y el presidente del Colegio de Abogados de Viedma, Jorge Manzo. Magistrados, profesores, abogados, funcionarios y empleados también se dieron cita en el auditorio del Poder Judicial.

Zaratiegui celebró la realización del acto conjunto y el lugar de la recordación: “La Corte Suprema de aquel entonces le dio legitimidad a un gobierno de facto y, de algún modo, avaló todo lo que vino después. Por eso Me parece altamente simbólico que se haga en el Poder Judicial”.

El comienzo de esta recordación en Viedma “es combatir el olvido. La memoria es lo que nos va a permitir crecer como pueblo y hacer realidad el Nunca Más”. Por último, resaltó que “en épocas del terror muchos optan por la indiferencia, pero otros optan por la valentía. Es preciso rescatar a estos abogados laboralistas que defendieron los derechos de las personas”.

Por su parte, la profesora de Derechos Humanos de la carrera de la Abogacía de la UNRN, Verónica Piccone, afirmó que “es un recordatorio necesario. Se conmemoran 40 años de la Noche de las Corbatas, pero este hecho representa a muchos abogados que fueron perseguidos sin distinciones de ideologías ni partidos. Muchos de ellos fueron perseguidos en las universidades, no solo por sus convicciones, sino por su condición de docentes”.

“Somos conscientes de que muchas de las puertas laborales de quienes estudian abogacía están vinculadas con el Estado. Pero así como la abogacía está ligada al poder, también puede ser un límite al poder arbitrario. Me parece que la memoria con pasados como el nuestro es un deber y hoy es también un derecho”, afirmó.

Jorge Manzo, presidente del Colegio de Abogados de Viedma, en principio describió la operación de la “Noche de las Corbatas”. Los operativos “no fueron al azar, eran abogados laboristas de prestigio. Sabemos que hubo complicidad civil en estas capturas”, aseguró.

Luego, hizo un repaso de distintas etapas democráticas, desde la CONADEP hasta los juicios por la verdad, que demuestran que ese pasado está presente siempre: “Cuando el Estado de Derecho se revierte, cuando lo público es utilizado para hacer terrorismo de Estado, no hay olvido. Me recibí en una universidad pública en Mar del Plata y algunos de mis profesores participaron de la querella de condenas a los represores de la Noche de las Corbatas”, rememoró.

Finalmente, la jueza Liliana Piccinini resaltó que “este mismo recordatorio se dio en otras ciudades argentinas, pero sin la presencia del Poder Judicial. Por eso valoramos doblemente que la carrera de Abogacía de la UNRN nos haya convocado y nos permitiesen ofrecer nuestra casa”.

Luego, explicó que contrariamente a lo que es posible conjeturar “la noche de las corbatas alude a una frase de los secuestradores. Uno de ellos le dijo a una de las víctimas: ´esta es la noche de las corbatas y la justicia la hacemos nosotros´. Vaya mensaje para quienes pertenecemos al Poder Judicial”.

“Los abogados de la noche de las corbatas bregaban por los derechos del sector más desprotegido de entonces, que eran los trabajadores”. En este marco, recordó el secuestro de Sergio Karakachoff, quien fue acribillado junto a su socio Domingo Teruggi, y el de Hipólito Solari Yrigoyen. “No tuvimos en esa época una Justicia independiente” que acompañara “a esos abogados valientes. Por eso, es gratificante que desde la carrera de Abogacía se les señale a los jóvenes que desde su profesión tendrán que bregar por el ejercicio de los derechos y tendrán que exigir también que el Poder Judicial continúe siendo independiente”, finalizó.

Luego, en un breve intercambio, se coincidió en la necesidad de reconocer y convocar a los abogados que actuaron en Viedma o bien hoy residen la capital provincial para que transmitan sus experiencias. El titular de la carrera de Abogacía, Fernando Barrio, tomó el compromiso de respaldar la actividad.