Un día clave en la historia de un frigorífico recuperado

(ADN).- “Ya tendríamos todo lo que nos pidieron”, resumió Felipe Gerbán, presidente de la Cooperativa de Trabajo de JJ Gómez, al referirse la inspección que realizará mañana el SENASA a la planta de faena y frigorífico, trámite clave en el camino iniciado para lograr el certificado de Tránsito Federal. Esa autorización es determinante en la ampliación de las fronteras comerciales de la fábrica y el desarrollo del potencial disponible, tanto en infraestructura como en recursos humanos.

A lo largo del año que culmina se han invertido 7 millones de pesos “puesto de manera íntegra por los trabajadores, sin aportes del Estado”, dijo Gerbán al referirse al plan de obras exigidas por el organismo sanitario para permitir que el ganado faenado en el frigorífico de Gómez pueda ser comercializado fuera de las fronteras de Río Negro.

El cronograma de refacciones consta de 15 puntos, de los cuales se han ejecutado varios, como nueva zona de vestuarios, accesos con zona sucia y zona limpia, fuelles aislantes en el sector de carga de camiones, reparación de pisos, baños nuevos en la faena de vacunos y filtros sanitarios. En la faena se cambiaron las viejas plataformas (palcos) de hierro por otros modernos de acero inoxidable, además están en marcha los digestores (que procesan los desperdicios).

Se estima que cumplidos 7 puntos, se podría lograr el certificado de SENASA, con la exigencia de seguir con el resto de las metas.

La autorización para que la carne faenada en Gómez se pueda comercializar, por ejemplo, en Neuquén, dará otra perspectiva a la planta, porque se podrían generar más puestos de trabajo y la obtención de recursos genuinos para seguir adelante con la modernización de las instalaciones.