Colman: «Galiano me debe 2 millones. Pagar, me va a pagar, eso te lo garantizo»

(ADN).- Fabricio Colman, imputado en la causa que investiga la quema del Poder Judicial, aseguró que nada tiene que ver con el caso. Dijo que «alguien tiene que pagar» por la interna entre jueces, fiscales y abogados que «hicieron mal su trabajo». Contó que era una suerte de guardaespaldas de Ignacio Galiano a quien vinculó con varios delitos. Y aseguró que el abogado le debe dinero y lo piensa cobrar.

«Galiano me debe 2 millones de pesos. Pagar, me va a pagar, eso te lo garantizo» les dijo Colman a los periodistas Pablo Fedorco y Juan Pablo Gorosito (Radio Patagonia) a quienes les brindó una entrevista en la cárcel donde está alojado.

Colman explicó el vínculo con Galiano: «Burocráticamente hablando, me pidió que le cuide el culo». Una suerte de gardaespaldas. Así nace la «deuda» que el imputado le reclama al abogado. Es a partir de un viaje a Rosario «a buscar plata, 23 millones». «Yo trabajaba en exteriores», aclaró. Allí hubo un inconveniente y Colman -según contaron los protagonistas de la entrevista- habría dejado en «garantía» un reloj de 400 mil pesos. «Era de mi viejo», aclaró el detenido.

El pago de ese trabajo, el reloj y una camioneta Chevrolet S-10 («que el gordo tuvo guardada porque estaba involucrada en una causa por tráfico de drogas) suman los 2 millones que Colman le reclama a Galiano. «No sabía que el gordo era tan garca» dijo. «Yo salía de estar en cana» -relató Colman- en el momento que Galiano lo contacta para trabajar con él.

Colman asegura que es un «perejil». Y aunque asumió tener «una carrera delictiva», ratificó que con la quema de Tribunales nada tiene que ver. Por el contrario, se considera un chivo expiatorio. «Acá hay una interna entre jueces, fiscales y abogados» que «hicieron mal su trabajo» y «alguien tiene que pagar». «Acá todo se mezcla con los tocanenas» denunció, en referencia a procesados en una causa por violación de menores y facilitación a la prostitución en Viedma.

Fabricio Colman está detenido en «un buzón» del Penal de Viedma. «Soy un desaparecido en contexto de encierro», asegura.

En otro tramo de la entrevista, el imputado dijo que «(Gustavo) Salinas tiene mucho que ver». «No sabía que era milico, lo veía siempre en el estudio de Galiano» comentó. Y se quejó por «el abuso de autoridad» de la Policía y aseveró que «plantan pruebas para inculpar a gente inocente en ilícitos». En se sentido, manifestó que su hermano, Iván Colman,también imputado y detenido en el marco de esta causa, «es inocente», «le plantaron las huellas». «La Policía te toma las huellas y las congela. Después las planta donde quiere» denunció. «¿Cómo no van a tener los bidones las huellas de mi hermano si fue él quien se los dio a la Policía cuando allanaron mi casa?». Los bidones -supone la Justicia- son los que se utilizaron para transportar el combustible que fue derramado en el Juzgado Nº 4 para incendiarlo.

Colman dijo que «Galiano es un grano en el ojete para los funcionarios judiciales porque les conoce todas las cagadas». Sin embargo, vinculó al abogado con el tráfico de drogas. «Vos que andás en la tranza, tirame un gramo, si vos sabés que yo tomo, que soy del palo», relató a los periodistas y enseguida se desmarcó: «Yo no vendo. El tranza es un papel sin bandera».