Ocampos: «la fruticultura en su hora más difícil»

Ya sin temores a caer en la exageración y el alarmismo de otras crisis, se puede decir que la fruticultura regional atraviesa la peor crisis de su historia y que esta vez alcanzará sin excepciones a todos los sectores de la actividad.

Con una preocupación creciente son los productores los que han tomado la vanguardia de una lucha, que hasta el momento ha recibido respuestas que poco contribuyen a paliar la situación.

Pujas entre el gobierno provincial y el nacional, sobre a quién le corresponde la mayor responsabilidad y un sector que observa absorto como poco a poco se involucra en una campaña preelectoral que no le pertenece y que en nada ayudará a resolver sus problemas, son los comentarios cotidianos de una crisis que tiende a agravarse.

El diálogo con los chacareros, en plena protesta a la vera de las rutas, se convertía en un rosario de reclamos no escuchados, la creciente inseguridad en sus emprendimientos y un marcado pesimismo en cuanto a la espera de respuestas contundentes a sus exigencias.

No falto la denuncia sobre los errores compartidos, entre empresas y el Senasa en el ingreso de fruta a Brasil, sin la debida sanidad, provocando el cierre total de las fronteras de ese país para los camiones portadores de fruta rionegrina, dándole otro mazazo a la actividad, ya casi sin reacción.

En este caso, voceros del oficialismo provincial se encargaron de marcar su enojo, sobre la responsabilidad del Senasa y algunas empresas en el ocasionado cierre de fronteras.

La visita de la presidenta Cristina Fernández, prevista a la ciudad de General Roca para esta semana, despertó alguna esperanza en el sector productor sobre la posibilidad de una respuesta contundente del gobierno nacional, lo que los llevó a suspender cualquier medida de reclamo en estos días.

En esa dirección de protesta, se hablaba de volver a las rutas, generar algún corte en la actividad petrolera, con el cierre de caminos y vías de acceso a los pozos extractivos y otras medidas que dieran mayor visibilidad a la existencia de la crisis.

El objetivo final de los productores es que se entienda la gravedad de la crisis, sobre todo en aquellos que conocen muy bien los avatares de la actividad y generen acciones que se compadezcan con la situación terminal para muchos de ellos, que ya no admite paliativos sino soluciones concretas.

Jorge Ocampos
Legislador CCARI FRENTE PROGRESISTA