Ingresos renegociación petrolera ● Evelyn Rousiot

Viedma recibirá por única vez, directamente de manos de las empresas petroleras que renegociaron sus contratos de explotación hidrocarburífera, poco más de siete millones de pesos. La cifra, que en principio puede parecer exigua, podría haber resultado en el puntapié inicial para grandes inversiones que significaran un cambio proactivo en la economía de la ciudad.

Contrario a eso, el Intendente Foulkes prefirió utilizar ese dinero, ese ingreso extraordinario que tendrán las arcas municipales, en obras que si bien son necesarias, representan responsabilidades propias y cotidianas del gobierno Municipal como el asfalto por ejemplo, que además es usualmente abonado luego de realizado por los propios vecinos frentistas.

En declaraciones públicas el Intendente manifestó que esos siete millones de pesos provenientes de las empresas petroleras se utilizarán para asfaltar un par de calles de la ciudad y comprar contenedores para la basura. En la economía cotidiana de un hogar sería como sacarse unos pesos a la quiniela y en lugar de reparar, ampliar o construir áreas vitales del hogar, cambiáramos un foquito y nos comiéramos un asado.

“El dinero debe utilizarse en obras que sean fáciles de rendir” expreso el Intendente de nuestra ciudad demostrando o bien la mediocridad de su gabinete que se le dificultaría realizar una rendición de cuentas un poquito más compleja que presentar la factura de la compra de contenedores de basura o bien que en realidad lo que quiso decir y no pudo fue “El dinero debe utilizarse antes del 3 de Mayo porque tememos que ganar las elecciones”.

Viedma necesita obras que posean un efecto multiplicador en la economía de la ciudad. Podríamos poner como ejemplo la construcción de un centro de convenciones que iría de la mano con la incorporación de la ciudad al listado del Ministerio de Turismo de la Nación como una de las ciudades receptoras de Turismo de Convenciones, o también podríamos pensar una inversión enserio en infraestructura de nuestro olvidado Parque Industrial de Viedma. Obras como éstas lograrían iniciar, aunque sea mínimamente, la tan mentada diversificación de actividades económicas que de manera imperiosa necesitamos. Claro, “obras como éstas” no son “fáciles de rendir”, no estarán listas antes del 3 de Mayo y van más allá de la gestión actual.

Siete millones de ingresos extraordinarios: asfalto y contenedores de basura. Una oportunidad malgastada, trabajaremos para que sea la última.