Weretilneck inauguró el nuevo edificio del CEM “Niño Jesús” de Villa Regina

Regina.- El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, dejó inaugurado este viernes el nuevo edificio del Centro de Educación Media “Niño Jesús” de Villa Regina. La actividad se desarrolló en el marco del 90º aniversario de la localidad.

Se trata de la primera etapa del edificio que contó con una inversión provincial superior a $2.283.936 y brinda respuesta a una demanda de la comunidad reginense y salesiana. Este nuevo edificio permitirá albergar una matrícula de 200 estudiantes secundarios que provienen de barrios populosos y egresados del colegio primario Niño Jesús, gracias al trabajo mancomunado entre la Fundación Padre César Rondini, cura inspirador e impulsor de esta obra, y el Ministerio de Obras y Servicios Públicos.

Participaron del acto la ministra de Educación y Derechos Humanos, Mónica Silva, y el vocal gubernamental del área, Fernando López; el intendente de la ciudad, Luis Albrieu; la defensora del Pueblo, Nadina Díaz; los legisladores provinciales, Tania Lastra, Francisco González y Carlos Vazzana; el ex gobernador Miguel Saiz; el intendente de Ingeniero Huergo, Miguel Martínez; el presidente de la Fundación, Héctor Zubeldía; la representante legal Norma Quintans; la directora del establecimiento, Bibiana Cassol; y la comunidad educativa.

En la oportunidad, el Gobernador Weretilneck señaló que “compartir hoy el aniversario de Villa Regina en una escuela habla por sí solo de lo que es una comunidad. Si hay un lugar donde se sintetiza la sociedad, donde la comunidad expresa toda fuerza, su sentimiento, su vigor y hasta su crítica, es en la escuela”

“Un lugar donde se construye el futuro de la comunidad y la sociedad es en la escuela y fundamentalmente en la escuela pública. Por lo tanto estar aquí en este CEM poniendo en marcha el aniversario de la ciudad es muy simbólico y trascendente”, resaltó.

“Siempre está la discusión sana, si las instituciones parten de los edificios o los edificios son consecuencia de las instituciones. Si las instituciones parten de la necesidad de la gente y la necesidad de construir algo nuevo o primero tiene que venir el edificio para que esa comunidad empiece a compartir un sueño. La verdad que siempre ha sucedido que los edificios son la consecuencia de lo que una comunidad ha interpretado como una necesidad”, indicó a los presentes.

Señaló además que “hay muchos ejemplos como el de ustedes que van a seguir teniendo de parte nuestra todo el apoyo”.

“Los edificios son la consecuencia de los proyectos que tienen alma. El alma del Padre está aquí y él nos contagió a todos. Este edificio es la consecuencia de los sueños, de las ideas y de los proyectos pero fundamentalmente de una sociedad que quiere que su niñez y adolescencia sea mejor. Si logramos que los niños y niñas rionegrinos tengan mayor cultura y mayor educación que la que pudimos tener nosotros bienvenido sea, porque esa es la provincia que va a venir”, concluyó.

Por su parte, el intendente Luis Albrieu destacó la importancia de la obra para la comunidad reginense. Recordó además que la aprobación de la escuela fue en 2010, pero fue en el año 2012 que ante el pedido de la comunidad se reunieron con el gobernador, Alberto Weretilneck para explicarle lo que significaba para Regina la concreción de esta obra. “En ese momento con buen criterio y buena voluntad, el Gobernador dijo que sí y hoy ese sueño es una realidad”, resaltó.

Finalmente, la responsable legal del establecimiento, Norma Quintans, invadida por la emoción recordó el anhelo del Padre César Rondini por la cristalización de esta obra.

Rememoró además que en el lugar se había iniciado con un proyecto de la mano de los inmigrantes italianos que habían soñado con la edificación de un Hospital Italiano, pero que sin embargo la idea quedó trunca. “Sin embargo, no se dieron por vencidos cuando el predio fue a remate. Fue la señora Inés Giovanini junto a un grupo de italianos quienes pudieron salvarlo y quien antes de morir le cedió este espacio al Padre Rondini para que realice una obra educativa”.

Sostuvo que a partir de 1990, el sacerdote inició gestiones con el Gobierno Nacional y Provincial para poder hacer esta obra. Señaló que el Padre Rondini, ya en ese entonces planteaba que cada escuela primaria debía tener un colegio secundario, “adelantándose a los tiempos que venían”.

Pese al fallecimiento del sacerdote, Quintans destacó que los integrantes de la Fundación continuaron su legado. Y agradeció el acompañamiento de los padres y la comunidad para brindar las comodidades que los alumnos necesitan y “que en la actualidad son 200 alumnos. Desde la Fundación queremos ser para ellos transmisores de nuestra Fe y educar a estos jóvenes en valores”.

Se mostró convencida de que contará con el apoyo del Gobierno Provincial para la continuidad de la segunda etapa del proyecto.

Finalmente agradeció al equipo directivo y docentes porque “sin ellos no se podría haber seguido adelante. Los comienzos fueron difíciles. Mostrarle a los padres que la escuela funcionaba en papeles no era fácil. Sin embargo hoy tenemos 200 estudiantes. Hay toda una respuesta de la comunidad”.

“A los alumnos les digo que aprovechen este tiempo, que los queremos preparar hombres y mujeres para el futuro. Honrados ciudadanos y buenos cristianos”, concluyó.

Características de la obra

Las nuevas instalaciones poseen cuatro aulas comunes, oficinas de dirección, secretaría y sala de profesores. También se construyó una kitchenette, sanitarios para alumnos, docentes y discapacitados. La batería de sanitarios está dimensionada para esta primera etapa, y su diseño tiene en cuenta el futuro crecimiento de los mismos. La obra fue ejecutada estuvo a cargo de la empresa Zigma y cuenta con una superficie cubierta construida de 397,16 metros cuadrados.