Está en Tribunales “guerra” entre empresas por presuntos incumplimientos de contratos

Sierra Grande (ADN).- Una puja entre dos empresa (una constructora y la otra, minera) por cobro de dinero y también la demanda por daños y perjuicios entablada por un particular contra ambas firmas por la presunta apropiación ilegal de arena, que llevaría casi seis años de análisis en ámbitos tribunalicios, derivó a fines de setiembre en el rechazo por parte de la Cámara en lo Civil, Comercial y de Minería de Viedma del recurso de apelación presentado por la constructora.

Se trata de las empresas Ingeniero Carlos Ramasco y MMC Minera Sierra Grande. Una achacó a la otra presuntos incumplimientos contractuales por materiales de una obra.

La jueza Sandra E. Filipuzzi de Vázquez refirió que las actuaciones a la Cámara con motivo de la apelación formulada contra la sentencia de primera instancia que resolvió no hacer lugar a la demanda que interpuso Ingeniero Carlos Ramasco SA contra MCC Minera Sierra Grande SA.

Según consta en la reciente resolución judicial, se trata del reclamo del cumplimiento de un contrato de locación de obra celebrado entre las partes y donde una de ellas -demandada MCC MInera- se opone a la procedencia de la acción planteando un incumplimiento parcial del contrato y, en su consecuencia, su derecho de retención y donde “los contratantes si bien coinciden en la celebración del mismo, difieren en la existencia de los incumplimientos achacados por cada uno de ellos y en el alcance e interpretación de las cláusulas contractuales…”.

Para la jueza viedmense, del propio instrumento contractual existen elementos que permiten inferir que ambas partes se vislumbran como empresas con experiencia necesaria para la realización de este tipo de contratos, cuyo objetivo es la realización de obras (en el caso tareas encomendadas por el contratante para la concreción de la obra de acueducto de recuperación de agua industrial entre las areas industriales I (Bocamina) y II (Punta Colorada), que no pueden equipararse a un particular sin experiencia, o desconocimiento de las reglas y riesgos propios de la referida actividad.

En el mismo expediente se consigna lo relacionado con la demanda por daños y perjuicios entablada por Jorge Orlando Picavía en contra de la empresa Ingeniero Carlos Ramasco SA y Minera Sierra Grande SA por $ 210.000 o lo que en más o en menos resulte de la prueba a producirse en dichas actuaciones.

Tal demanda lo es en concepto de reparación integral por los daños sufridos (contra su propiedad, pérdida de chance y daño moral) por “la apropiación ilegal de arena del inmueble de su titularidad para la realización de la obra acueducto de recuperación de agua industrial de titularidad de la empresa Minera Sierra Grande SA”. (ADN)