Fraude en UPCN, las instituciones de la democracia deben intervenir

El gobierno de la provincia de Rio Negro no puede quedarse cruzado de brazos ante la actual situación planteada en el gremio UPCN. Esta organización nuclea a más de 12000 trabajadores de la administración pública provincial y es la principal interlocutora con el Estado a la hora de las negociaciones salariales.

Es fundamental para el gobierno que el gremio con el cual preferentemente acuerda sea fuerte, sólido y representativo, más aún, cuando se ha buscado sacar del medio a ATE de manera constante, ya sea por las formas de protestar o por lo extremo de sus reclamos.

Hace pocos días Scalesi se reunió con el ministro Di Giacomo para reclamarle, porque entendía que el acuerdo salarial logrado hacía pocos días era insuficiente. El ministro le manifestó que el gobernador entendía que era lógico que cualquier reunión para renegociar fuera para después de las elecciones del gremio.

Con semejante situación irregular y con fuertes sospechas de fraude electoral en los comicios gremiales que los tornan en un verdadero escándalo, ¿está Scalesi en condiciones de sentarse en una mesa con las principales autoridades del Estado? La respuesta es sencilla y corta NO. Y el gobierno de esta forma se estaría quedando de hecho sin alguien fuerte del otro lado del mostrador con quien negociar y acordar políticas salariales.

Por esto, por el respeto a los miles de afiliados que votaron el pasado 29 de mayo, los que optaron por una u otra lista, pero que en definitiva apostaron por el ejercicio de la democracia sindical y por ser la máxima autoridad institucional en la provincia, es que el Gobierno debe intervenir, exigiendo transparencia y en todo caso aportando veedores que fiscalicen la continuidad del acto eleccionario, incluso también deben solicitarlo y hacerlo representantes institucionales de los distintos partidos políticos. Pero esto es urgente, ante el riesgo y la denuncia de fraude electoral no se puede esperar.

Carlos Apablaza
Viedma