Padres de dos presuntos jóvenes asaltantes niegan versión policial

Viedma (ADN).- Carlos Sosa y Raúl Calfupán, padres de Brian (19) y Ezequiel (18), detenidos anoche por el supuesto asalto a una heladería en el centro de la ciudad, aseguraron hoy que “no son pibes de andar robando” y también afirmaron que los muchachos trabajan en una reconocida empresa constructora local.

Sosa y Calfupán concurrieron pocos minutos antes de las 9 a la Comisaría Primera para solicitar la entrega de varios elementos que policías les secuestraron a ambos jóvenes.

Antes, dialogaron con ADN. “Es cierto, la moto está floja de papeles”, dijo Sosa, quien negó que los jóvenes hayan estado armados. No obstante, no supo aclarar porqué Brian y Ezequiel escaparon más de 10 cuadras a toda velocidad. En la intersección de la avenida Rivadavia y bulevar Ituzaingó el pequeño rodado impactó fortísimo contra un automóvil.

“Que pidan los antecedentes de los chicos”, dijo Calfupán, que reafirmó que ambos son obreros de la construcción y trabajan en una conocida empresa local del rubro.

Uno de los jóvenes estuvo varias horas en terapia intensiva y ambos sufrieron heridas de consideración, con fracturas en las extremidades inferiores.

“Algunos policías los tiraron al piso y les gritaban chorros de mierda”, dijo Sosa, quien reiteró que “no son ladrones; más de 20 compañeros míos fueron al hospital a donar sangre; si fueran chorros no irían”, agregó el hombre visiblemente consternado por la situación planteada desde anoche después de las 22. (ADN)