Río Negro no tiene Política Cultural ● Armando Gentili

Cuando accedí, al frente de un equipo, como titular del área de Cultura provincial en el 2007 lo hicimos pensando que había mucho por hacer, no había gestiones anteriores que tuvieran mucho con lo que estábamos de acuerdo y lo que pudo ser rescatado o mejorado se mantuvo. Nos planteamos la necesidad de darle un impulso y posicionamiento real a la política de cultura, que se basaba en tres ejes: provincial, nacional e internacional. Recorrimos en varias oportunidades toda la provincia, cada pueblo y ciudad tomando contacto con intendentes y responsables de las áreas de Cultura, para conocerlos, escuchar sus necesidades e inquietudes, priorizando acciones en muchos pueblos con menor capacidad de gestión, con menos presupuesto, sobre todo los pueblos de la Línea Sur. Todo ello sin hacer discriminaciones partidarias o sectoriales.

La política en general se preocupa por las actividades económicas, productivas, de salud, educativas, de seguridad, sociales. Pero, por desconocimiento o por desinterés poco tienen en cuenta las actividades culturales que están involucradas y formando parte de todos estos puntos anteriores.
No estoy sólo hablando de las actividades culturales de un nivel superior, para lo cual en nuestra gestión impulsamos salones y muestras de artes plásticas, encuentros de escritores, publicación de trabajos, festivales de cine, teatro y música, fomentamos a los museos de todo tipo, ayudamos a las bibliotecas, etc.

Todo en la medida de las posibilidades de un presupuesto absolutamente acotado pero siempre encontrando el área de gobierno que nos ayude a cumplir con los objetivos, haciendo que la gestión supla a las posibilidades presupuestarias.

Potenciamos el Salón de Artes Visuales reservado para artistas plásticos de la provincia, rotándolo por distintas ciudades de la provincia. Realizamos capacitaciones en Danzas Folklóricas, un exitoso programa de Identidades Productivas en el que se confeccionaron prendas con materiales de la provincia y fueron presentadas con un desfile en Las Grutas en una pasarela en a playa, inolvidable, único, que fue conducido por Tete Coustarot. Realizamos Muestras de Pintura con artistas de distintas regiones y expuestas en el Patio Colonial de la Casa de Gobierno.
Logramos reuniones permanentes en distintas ciudades con todos los Referentes de Cultura de todas las ciudades, verdaderas jornadas de intercambio de experiencias y contactos.

Planteamos una verdadera Política de Museos haciendo reuniones, material impreso y difusión de la Red de Museos, vinculándonos entre todos y apoyando en las distintas acciones. Recorrimos asiduamente todos los museos y haciendo obras como la ampliación del Museo de Valcheta, de Allen, el comienzo de la construcción del de Cerro Policía, dejamos los planos del museo Tello y ayudamos para la inauguración del de Los Menucos.
Realizamos un programa de estimulo de la Música que se llamó Río Negro con Voz, con distintas sedes de la provincia emitiendo la final emitida por Canal 10 en directo y con votación del público. Coordinamos los Encuentros Provinciales de Coros, realizado el primero en Cipolletti y el segundo en Viedma, actividad coral que estimulamos mucho.
En cuanto al Fondo Editorial Rionegrino, trabajamos con seriedad en la convocatoria a escritores y un jurado nacional determinó las obras seleccionadas, lo que nos permitió editar unas 20 obras, que presentamos en la Feria del Libro, teniendo Río Negro un stand de jerarquía.
En nuestra actividad no había descanso, ya que continuaba nuestra presencia en todos los centros turísticos con el Verano Cultural, lo que marcaba una fuerte presencia con distintos atractivos culturales ya sea en las playas como en lugares cerrados.
Llevamos a cabo el programa Pinto Río Negro, un concurso realizado en las escuelas que otorgó importantes premios, tanto al niño como a la escuela y otras acciones que realizamos con el Ministerio de Educación. Entregamos equipamiento informático a las Bibliotecas y realizamos capacitaciones. Con nuestra gestión volvió el Cine Móvil. Seminarios gratuitos y becas para estudiar en la escuela de Luis Ordoñez.

En el Eje Nacional, organizamos el primer Salón Nacional de Pintura con importantes premios, participaron artistas de 16 provincias, no se realizó más. Le dimos importancia a las Danzas Folklóricas y al Festival Provincial de Choele Choel, permitiendo de esta manera tener representaciones para el Festival de Cosquín , la última fue en enero del 2011 con un éxito rotundo y una delegación muy digna.

El Cine fue otro gran desafío. Desarrollamos el primer Festival Nacional en General Roca y Allen y luego lo consolidamos en Bariloche en dos oportunidades, teniendo en cuenta que Río Negro tiene tres Escuelas de Cine, y elegimos un nombre que le daba real posicionamiento a la provincia: A Rodar Río Negro.

En el plano internacional estaba la Política de Museos, que a partir de la Red de Museos y el posicionamiento de la Paleontología, cuyo objetivo era científico, educativo, cultural y turístico, con intercambio de científicos de distintos países. Ejercimos una férrea defensa del Patrimonio Cultural comenzando con el fomento de la acción localizada de los museos como guardianes de la riqueza rionegrina lo que nos llevó a impedir el ingreso de profesionales que no estaban dispuestos a cumplir la Ley rionegrina y respetar nuestros derechos a decidir sobre el patrimonio poniendo como primer objetivo el interés de los rionegrinos. Hoy la situación es dudosa a partir de la falta de transparencia en los permisos y la ausencia de convenios legales.

Todas estas acciones permitieron que Rio Negro tuviera la Vicepresidencia del Consejo Argentino de Cultura y fuera partícipe, representando a las provincia patagónicas en el Comité del INCAA y la presencia en la Feria del Libro en Frankfurt donde Argentina fue país invitado de honor y en el stand pudimos aportar libros de los escritores rionegrinos editados por el FER, formando parte de la Delegación Argentina.

Siempre pensamos que habría que llevar adelante un esquema complementario de acercar la actividad cultural de todo tipo a la mayor cantidad de personas, de todas las condiciones sociales y de todas las geografías provinciales, como una forma de llevar a miles de personas alternativas laborales desde las actividades culturales y ayudando a nuestros niños y jóvenes a encontrar en la Cultura una forma positiva de entretenimiento y crecimiento personal. Un niño o un joven participando de clases de instrumentos musicales, de una murga, de un taller de teatro, títeres, pintura, cerámica, tejidos autóctonos o cualquier otra manifestación cultural adquiere una visión distinta de la vida que seguramente lo ayuda a alejarse del delito, el alcohol o las drogas.
Río Negro tiene la fortuna de contar con una actividad cultural que se fue desarrollando a pesar de las gestiones oficiales, muchas veces imponiéndose a las autoridades de turno, destacando que los municipios fueron en muchos casos gestores culturales importantes.

Cuando llegó este nuevo gobierno, con tanto impulso y promesas de cambios, pensamos que con lo que habíamos construido en los cuatro años de nuestra gestión, tenían una base importante para seguir desarrollándose.
Nos equivocamos. Se dedicaron a destruir todo lo hecho, algo que no era propio sino de todos los rionegrinos.
Así la Provincia dejó de participar del Festival de Cosquín, una vidriera nacional e internacional para nuestros artistas. También, dejó de lado Jesús María y sólo con los airados reclamos del intendente de Cervantes volvieron a apoyarlo.

El festival rionegrino de cine desapareció, solo quedó un esquema local, como los encuentros de teatro, los salones de Plástica, el apoyo a los museos y abandonaron a las bibliotecas. Hicieron una cacería de brujas con el personal de Cultura, valioso y consustanciado con su actividad y se dedicaron a nombrar a personas de un modo exagerado, más aún teniendo en cuenta la casi nula actividad cultural que llevaron a cabo.
Es increíble que actualmente sólo expongan como una actividad sostenida los espectáculos en la Residencia de los Gobernadores, algo que sólo sucede en Viedma y con una asistencia de público más que minoritaria.

Es una lástima el retroceso que vemos en la Cultura de Río Negro y que haya quedado sustentada nuevamente en la actividad local y generalmente privada. Que no vean la importancia de masificarla teniendo una base de extraordinaria importancia.

Creemos que ya han dejado pasar la oportunidad de lograr hacer crecer estas actividades y muchos menos dependiendo de un Ministerio como el de Turismo que seguramente poco interés tendrán en hacerlo pensando que tienen un cúmulo de actividades específicas que no pondrán atención en la Cultura como debieran hacerlo.

Los dirigentes políticos deben entender que la Cultura tiene suficiente importancia, involucra y puede sumar a un sector mayoritario de la población, mucho más que el deporte, ser una fuente de empleo fabulosa y de satisfacciones personales y generales. La Cultura merece tener una importancia mayor y ser un Ministerio para colaborar efectivamente en el crecimiento de los rionegrinos y ser un vehículo de crecimiento social de muchas personas.
No perdemos las esperanzas de que algún día nuestra provincia tenga una Política Cultural con mayúsculas y continuidad, en serio, desplegando toda la imaginación y creatividad de nuestros artistas y gestores culturales, que muchas veces han encontrado en los funcionarios y sus egoísmos sectoriales el freno a sus iniciativas.

Armando Gentili.
dontólogo, especialista en Cirugía Maxilofacial. Artista plástico. Director de la Galería de Arte Maison Blanche, Allen. Ex subsecretario de Cultura Provincia de Río Negro, 2007 a 2011.