Detienen en Bariloche a policía acusado de matar a jubilado, hace 10 años

Bariloche (ADN).- El ex policía Diego Di Bella tenía alquilada una cabaña cerca del lago Gutiérrez, en Bariloche, en deplorable condiciones de higiene, en medio de decenas de perros y gatos, orina y excremento.

Así vivían el ex policía prófugo, su pareja –la abogada Silvina Maquieira– y sus dos hijos de 6 y 7 años. Di Bella y Maquieira eran buscados por Interpol desde hacía 10 años, por el crimen de un jubilado en el barrio porteño de Recoleta, publicó hoy el diario Clarín.
Ambos integraban la banda de la “Viuda Negra” liderada por Eva Leonor García, quien se dedicaba a narcotizar a personas mayores para después robarles. En la propiedad de la pareja, donde funcionaba la guardería de perros “Brisas de Angeles” , descubrieron armas y unas 20 identidades falsas con la fotografía del ex policía.
Ayer por la tarde dos organizaciones locales se ocuparon de devolver los 40 perros en custodia a sus dueños y de reubicar a los 30 gatos abandonados. Al parecer, el prófugo había olvidado por completo el límite entre su ámbito y el de las mascotas, convirtiendo la vivienda en un caótico espacio comunitario. Sus propios hijos dormían en un colchón, en un altillo en el que gatos y perros comían y defecaban.

El ex agente mantuvo a sus hijos marginados desde bebés. Según testigos, ambos exhiben serias secuelas en su formación y lenguaje. Los dos tienen problemas para hablar y uno camina con dificultad. “No sacaban a los chicos nunca, vivieron todos estos años prófugos y ellos lo padecieron.

No iban a la escuela, estaban encerrados, no saben hablar prácticamente”, indicó una fuente policial.

Di Bella fue apresado el miércoles por policías federales en pleno centro de Bariloche, mientras caminaba junto a su esposa y sus hijos. La mujer, que no fue detenida en ese momento, se fugó horas después de su casa con los chicos y hasta anoche se desconocía su paradero.
Según le indicó una fuente del caso a Clarín, hacía varios meses los informantes de la fuerza y algunos vecinos les habían hablado de un hombre que exhibía una placa y se hacía pasar por policía. Los investigadores descubrieron que el sospechoso tenía una guardería de animales en la zona del lago Gutiérrez y que llevaba una existencia de muy bajo perfil. Al punto que sus hijos prácticamente no salían de la casa ni asistían a la escuela.

Cuando confirmaron que las características de su rostro coincidían con las del ex suboficial Diego Di Bella decidieron apresarlo, desconociendo que quien lo acompañaba era Maquieira, también buscada. La investigación fue desarrollada por la fiscalía federal, con el aval del juez Leónidas Moldes.

Di Bella había alquilado cuatro meses atrás una humilde cabaña cerca del lago Gutiérrez, con un terreno de dos mil metros cuadrados, por 2.000 pesos mensuales. Para concretar el arreglo utilizó el nombre de otra persona, a la cual le había robado su billetera, de apellido Hernández.

El ex policía les avisó de entrada a los dueños de la inmobiliaria Escobar que quería instalar una guardería de perros y gatos. El terreno y la cabaña de dos pisos le pertenecen a Omar Valerio, un pastor de la Iglesia Evangélica Siervo del Señor. Valerio dice haber visto en un par de ocasiones a Di Bella y su mujer.

“Cuando los conocí me preocupó mucho la situación de los chicos. Ambos tenían problemas de lenguaje, uno de ellos cojeaba, me dio la sensación de que tenían algún tipo de lesión cerebral o un retraso madurativo, estaban mal vestidos, muy pobremente y descuidados. Llamé a la inmobiliaria y se los dije, me preocupaba la salud de los pibes”, aseguró el pastor a Clarín.

La Policía estima que Di Bella y Maquieira han pasado en la zona cordillerana buena parte de los 10 años que llevan escapando de la justicia.

La investigación policial, además, intenta determinar si la abogada formaba parte de la banda delictiva Los Tigres, del barrio Valentín Alsina de Neuquén, ciudad a la que iba y volvía periódicamente. Los investigadores creen que con el dinero obtenido en diversos robos en la capital neuquina se mantenían hasta ahora. (ADN)