Volver a empezar

En el día de ayer escuché en una nota de Noticiero seis (y hoy lo leo en los medios digitales) que “Buscan regularizar y refuncionalizar tierras en el barrio Nahuel Hue”. Me sorprendí en un primer momento porque pensé en mi imaginario, que esas etapas ya estaban superadas, pero la real realidad es que no, siempre es como comenzar de nuevo.
Allá por Mayo del año 2011, siendo yo Director del Hospital Zonal Bariloche y a raíz de la solicitud al Concejo Deliberante de la cesión de un lote en el Barrio Nahuel Hue para la construcción de una Fundación, fui invitado a dar mi parecer en el Concejo y en dicha reunión, me comprometí a tratar de hacer avanzar lo que fuera posible, la construcción del Centro de Salud en ese Barrio (proyecto que había quedado “congelado” en el tiempo). A partir de allí y a pesar de haber tenido que soportar cartas y notas lapidarias de futuros ex-funcionarios y campañas de radio que solo intentaban demostrar mi “inhumanidad” (http://bariloche2000.com/noticias/leer/replica-a-di-lisio/59971, http://www.elciudadanobche.com.ar/interior.php?accion=ver_nota&;id_nota=22114,http://www.anbariloche.com.ar/noticia.php?nota=21488 ) me encargué de realizar todas las gestiones posibles para poder concretar la construcción del Centro. Me notifiqué de la situación en que estaba el proyecto, tuve reuniones con el representante de ese momento de Tierras y Viviendas (Sr. Zamora) junto con ASOCLUBA y la presidente de Junta vecinal del barrio entre otros, y se coordinó la distribución de los lotes para que todos los sectores quedaran conformes (no se le escatimaba ningún sector de tierra a ninguno de los interesados, sobre todo a ASOCLUBA que iba a poder tener su sede y las tres canchas, no como en tratativas anteriores donde solo se le dejaba lugar para dos). Me encargué que se firmara el convenio con el Municipio hasta que fuera tratado en sesiones por el Concejo Deliberante, como había sido el compromiso en la reunión de Mayo, de acelerar el proyecto por obras públicas (planos y cálculos de costos) que iba a ser inédito, porque contaría con estación de ambulancia en el Alto Bariloche y guardia de 24 hs. Ya estaba comprometido el presupuesto del año 2012 para que el Centro se pudiera realizar por Obras Públicas de la Provincia y quedaba licitarlo y se calculaba que se podría comenzar la construcción para Enero de 2012. Por supuesto, sin ser yo un Director mediático y en los finales de un gobierno que, a todas luces, llevaba las de perder electoralmente, ninguno de los medios que tanto me habían atacado “levantó” estas noticias.

Como tampoco se interesaron por los arreglos efectuados posteriores a las cenizas, de los Centros de Salud, luego de 20 años en los que no se les cambiaba ni siquiera “un cuerito de canilla” y que se realizaron todos con fondos del presupuesto hospitalario (cambio de techo completo del centro de salud “La Cumbre”, cambio de techo completo de “Casa de la Salud”, ampliación en 2 consultorios y cambio de techo completo del Centro “El Frutillar”, si, el mismo centro que este año hizo colecta de fondos a través de una peña y una … nueva ampliación?, ahora tendrá como 5 consultorios?), o los mismos medios que no repararon en las ambulancias apostadas en el destacamento de bomberos del Barrio “2 de Abril” y en Playa Serena, o los esfuerzos y tratativas para que funcionara el Centro de Salud de Dina Huapi hasta las 20 hs. con su propia ambulancia, y que lo conseguimos.

Tampoco se hizo eco la noticia de la licitación de la nueva etapa del Hospital (Septiembre de 2011), que debería haber comenzado su construcción a principios del 2012. Hoy, luego de casi 2 años, es noticia la “nueva reestructuración” de tierras fiscales del Nahuel Hue, como empezar de nuevo, no hay Centro de Salud construido, no se comenzó (y no hay noticias que vaya a comenzar) la nueva etapa hospitalaria, no hay ambulancia en el Alto ni en Km. 13 y todos han conocido los conflictos que ha generado en Dina Huapi la falta de ambulancia y del funcionamiento correcto del Centro de Salud. Eso sí, los medios hoy están atentos y ávidos de novedades, las que informan siempre con palabras elogiosas (con o sin obras) y a las que yo considero veraces.

Deben ser veraces porque sería muy indecente decir que se hará lo que después no se hará. Igualmente, siempre a “alguien” le puede resultar conveniente que lo que necesitan los más necesitados no se concrete, porque de ese modo se puede seguir “prometiendo”. Será que en la Argentina estamos condenados a volver a empezar siempre?

Guillermo Di Lisio

Ex Director Hospital Zonal Bariloche