Procuración: designación del sucesor no es un misterio ● Ana Piccinini

El Capítulo IV de la Constitución Provincial en solo cinco artículos describe, entre otras cosas, la organización, funcionamiento y designación del Jefe del Ministerio Público. Parecen pocos artículos cuando nos ponemos a analizar la tremenda empresa que le encomienda el constituyente a este Instituto. El cargo es unipersonal. Quien lo detenta es llamado Procurador General. Es parte del Poder Judicial pero tiene autonomía funcional, reglamentada por la Ley K 4199, orgánica de la función.
El Procurador General fija las políticas de persecución del delito, junto con los funcionarios que de él dependen conforme a la Ley, llevando adelante unidad en la actuación. Es dueño de la acción penal, es el principal y más genuino defensor de la víctima y de la sociedad que se han visto dañadas y perjudicadas por la ruptura del orden consensuado por todos, es decir por el delito.
Este cargo de cuyo ejercicio eficiente depende tamaña empresa, se verá aún más realzado y poderoso cuando se legisle el Código que instaurará en la Provincia el Sistema Acusatorio. Aquí el Ministerio Publico acumulará para sí, todas las facultades inherentes y necesarias para la investigación penal y también todas las responsabilidades que surjan de esta labor.
Este es el cargo que se encuentra vacante, el que será cubierto la semana próxima.
A estos fines se está utilizando una metodología de elección que no les da certeza a mis representados de tener el mejor Procurador.
El hecho, de que el Presidente del Consejo que debe elegirlo (Art.204 de la C.P.), o sea el Gobernador, manifestara públicamente que el Jefe del Ministerio Público sería de Bariloche, promovió la inscripción de muchos y prestigiosos abogados de esa ciudad, pero cercenó las aspiraciones de candidatos que por habitar en otras ciudades se vieron desalentados de entrar en una compulsa que a todas luces aparecía viciada de por lo menos conversaciones o acuerdos previos que nublan de sospecha la transparencia que debería tener esta elección.
Esta autolimitación, decididamente unilateral, del Presidente al Cuerpo Elector vulnera el poder ciudadano ya que el convencional constituyente en ningún artículo de nuestra Ley Fundamental estableció que la elección de tamaño cargo debía estar circunscripto a una ciudad o región determinada de nuestra Provincia.
Del requisito impuesto de la residencia, a la proveniencia necesaria de una ciudad, hay una indiscutible diferencia.
El ámbito de su competencia, todo el territorio provincial, nos conduce al espíritu mismo de la selección, de entre todos los postulantes, con residencia de por lo menos dos años en la Provincia, inmediatos anteriores a la designación, se elegirá al mejor, al más apto, al más comprometido, al que convenza de ser el esperado.
Estoy plenamente convencida de que además con este mecanismo objetable desde su génesis misma, o sea la convocatoria restrictiva, se vulnera el Principio de Igualdad ante la Ley consagrado en las dos Constituciones que rigen nuestras conductas.
Como representante del pueblo rionegrino, debo decir también que me llama poderosamente la atención, que aún no siendo de la ciudad elegida para adjudicar el cargo, se presentó desafiante a la convocatoria la Camarista penal con muy poca antigüedad en el cargo, Dra. Alejandra Berenguer, residente de Cipolletti, ciudad de origen del Gobernador.
Podría decir, que esta presentación en soledad, a sabiendas de que los astros no la favorecerán, tiene que ver con un carácter intrépido y desafiante de una abogada que confía ciegamente en sus cualidades y calidades.
Podría pero no es así, la Dra. Berenguer sabe que esta Legisladora conoce de sus legítimas inseguridades, propias de su innegable responsabilidad al momento de presentarse a un cargo. De hecho integré el Consejo cuando fue designada Camarista y conozco, como examinadora de larga experiencia, los antes, los durante y los después de su entrevista personal.
La Dra. Alejandra Berenguer mantiene una estrecha amistad con el Gobernador desde hace años, de hecho ella misma se ha encargado de hacérselo saber orgullosa, a todos los integrantes del Fuero y del Foro.
Es, a mi entender, por lo menos sorprendente que legítimamente fundado en esta confianza, el mandatario sosteniendo una postura que hizo pública, permita que la Camarista se presente a compulsar un cargo que fue reservado por él, solo a los letrados de Bariloche.
De hecho, nunca es bueno, ser reprobado en una evaluación y en este caso es más conmocionante porque aun siendo ella la mejor, el desenvolvimiento de las negociaciones no se apoyará solo en la calidad y en la eficiencia de los candidatos sino, también, en intereses políticos subyacentes en la gran mesa electora. El gran decisor, imponiendo su impronta, no reconoce que hay lugares donde está vedado a la política imponer reglas que son de uso cotidiano en otros ámbitos. Confía en su investidura porque tiene más para ofrecer que el conjunto de los consejeros restantes.
Para un candidato que está diciendo el derecho dentro de su circunscripción, regresar a su tarea después de haber sido rechazado en un concurso de tan alto impacto restaña o debilita su imagen por lo menos hacia dentro del propio poder.
Tengo el derecho a suponer y lo expreso, que en realidad la presentación de la Dra. Berenguer fue alentada por el gran decisor. Y que a pesar de que él postule al hombre de Bariloche, sus actores en ese escenario están trabajando para que la Dra. Berenguer sea la próxima Procuradora Provincial.
Si esta candidata no tuviera chances, el propio gobernador, conociendo su estilo y la confianza que los une, la hubiera desalentado a presentarse para que no corra el riesgo de ser desplazada.
Las cartas están echadas, lamentablemente con mucha antelación y discrecionalidad.
Independientemente del respeto que les profeso a todos los que se han postulado, siento que perdimos la oportunidad de tener mayor cantidad de aspirantes y en consecuencia la posibilidad de darles a nuestros mandantes la certeza de que el escrutinio fuese lo suficientemente abarcativo para disminuir a la mínima expresión la posibilidad del error.
El Procurador General de Río Negro es una pieza fundamental en la lucha contra la inseguridad y su designación no es una decisión política es una decisión de Estado.

Ana Piccinini
Legisladora Provincial
FpV

TÍTULO ORIGINAL: EL MINISTERIO PÚBLICO ESTA VACANTE
LA DESIGNACIÓN DEL SUCESOR NO ES UN MISTERIO